Sergio García viajó a Madrid para obtener el visado de EE UU
Se lo denegaron, como a Bartrés
Amenos de una semana para que el Espanyol parta hacia Estados Unidos, donde a partir del domingo realizará una gira que les medirá con el Richmond Kickers y el Cincinnati FC, uno de los jugadores insignia del conjunto perico trata a contrarreloj de poder unirse a la expedición. Se trata de Sergio García.
El delantero abandonó ayer al mediodía la concentración del Espanyol en La Garrotxa para viajar a Barcelona, y de ahí hasta Madrid, con el fin de tramitar el visado que le permita acceder a Estados Unidos. A diferencia del resto de jugadores, a Sergio le denegaron inicialmente la documentación porque residió en Catar, donde entre 2015 y 2017 militó en el Al-Rayyan. Es por eso que se vio obligado a presentarse directamente en la Embajada estadounidense.
Pero el futbolista no es el único miembro del Espanyol que debe tramitar a contrarreloj su visado. Lo mismo le sucede a Jaume Bartrés, preparador físico, que como Sergio García se trasladó ayer de Olot a Madrid. En su caso, formó parte del cuerpo técnico del Al Wahda, de Abu Dabi, precisamente en el mismo periodo de tiempo en que el jugador estuvo lejos del Espanyol. Ambos regresaron al mismo tiempo, hace un año.
Además de haber residido en Catar y Abu Dabi, respectivamente, el gran problema por el que Estados Unidos les deniega el visado podría estribar en que los equipos de ambos participaron en competiciones continentales con sus clubes, por lo que pisaron países vetados por la administración de Donald Trump a finales de septiembre de 2017, entre ellos Irán o Libia.
Tanto Sergio García como Bartrés regresarán inicialmente a la concentración del Espanyol en Olot a lo largo del día de hoy. Habrá que ver si con el visado ya en tramitación.
El problema Jugaron en países de Oriente Medio vetados por Trump