Los hombres de Perarnau
Todos, personas de confianza y con pasado blanquiazul
Con la llegada de Rufete, el Espanyol completó su estructura deportiva. Un año después de la llegada del director general deportivo, Óscar Perarnau, y después de finalizar la primera temporada con los despidos de Jordi Lardín y Quique Sánchez Flores, el hombre de confianza de Míster Chen ya ha formado su equipo de trabajo. Diez personas que, con menor o mayor recorrido en el club, intentarán que el apartado deportivo dé ese salto de calidad que espera el propietario y sea rentable. Los diez hombres comparten rasgos: su pasado perico y la máxima confianza con Perarnau.
Rufete. Conoció a Perarnau, especialmente, en su último año de jugador ( 200809), cuando el ahora director general deportivo fue la mano derecha de Tintín Márquez en el primer equipo. El director del fútbol profesional debe aunar dos responsabilidades: utilizar su pasado de futbolista para estar cerca de los jugadores y utilizar su formación y experiencia de director deportivo para formar la mejor plantilla posible.
Rubi. Les unió el fútbol catalán, especialmente en su etapa en el fútbol base del Espanyol. Desde 2005 a 2008, Rubi y Perarnau compartían vestuario antes de entrenar a filial y Juvenil, mientras reflexionaban sobre fútbol. Ese deporte que les separó un tiempo: Rubi, un trotamundos de los banquillos; Perarnau, siempre apegado a su Espanyol.
David Gallego. Su labor el curso pasado en el filial y en el primer equipo le ha convertido en otro miembro del equipo de trabajo de Perarnau. Un plan B del club en caso de que las cosas vayan mal dadas. Uno de los máximos exponentes del modelo de juego que se quiere implantar en el fútbol base. Su continuidad en el tiempo también dependerá de su crecimiento como entrenador y de las propuestas que le puedan llegar. Fran Navarro. Con su pasado de jugador, el coordinador del fútbol base acumula una experiencia de diez años en el Espanyol, los últimos ligados al departamento metodológico. La apuesta de Perarnau por esa figura y por dotar a la cantera de una idea de juego cautivó a Chen.
Álex García. Ligado a Perarnau desde los comienzos de éste como técnico. Álex García, que destaca al margen de por sus conocimientos deportivos por sus valores humanos, es la persona encargada de tratar con las familias en el fútbol base. Una apuesta del director general deportivo para ligar siempre la formación humana del niño a la futbolística.
Felipe Sánchez. La cara menos visible del equipo de Perarnau. El secretario técnico lo fue durante dos temporadas del Prat. Luego forma parte de la dirección deportiva con Ramon Planes y de la secretaría técnica con Perarnau. Experto en fútbol francés.
Raúl Tamudo. Aunque su figura a día de hoy es incierta, es una persona vital para Perarnau, que siempre lo quiso incorporar en su equipo por todo lo que representa y por su conocimiento de la casa después de estar casi dos décadas en el club. Las dos últimas campañas estuvo ligado al cuerpo técnico.
Lauren Florido. Perarnau reside en el Maresme desde siempre y Lauren Florido era entrenador del Santa Susana femenino. Sus caminos se unieron y, conocedor también de la realidad femenina, el director general deportivo apostó por este técnico de 49 años para acompañar a Titi Camuñez en sus labores. Florido pone el foco en la base.
Eloy Pérez. La Ciudad Deportiva no se entiende sin Eloy Pérez. Y Óscar Perarnau, que llevaba dos décadas en el club, mantiene mucha relación con el director de Sant Adrià. Por eso mismo, y por su experiencia, se encarga de la gestión y la apertura de todos los centros de formación extranjeros.
Manolo González. Lleva media vida como fisioterapeuta del primer equipo, y es la persona en la que Perarnau ha confiado para liderar unos servicios médicos integrales en todos los equipos.
Cambios El director general le ha dado forma al proyecto tras un año en el cargo