Borja Iglesias “Gerard está encantado de que yo sea su relevo”

Agradable, valiente y deseoso de gustar y triunfar. Así se muestra en las distancias cortas Borja Iglesias, que llegó a desoír al Sevilla para recalar en el Espanyol, con el que debutará en LaLiga justamente ante el Celta, su exequipo. El hasta ahora único fichaje blanquiazul conversó con AS. ➥

¿Qué cuesta más? ¿Las cargas de trabajo de estas primeras semanas o la adaptación a un nuevo grupo?

—El conjunto de todo eso es lo que te permite estar a gusto. Cuando empiezas en un sitio, los primeros días cuestan porque ya hay un grupo medio hecho y te tienes que ir integrando poco a poco. De esta manera, me he podido ir introduciendo desde el principio tanto en el grupo humano como en los entrenamientos.

—¿Se eternizó su fichaje por el Espanyol? —Hubo algunos momentos tensos, porque sientes que no puedes hacer casi nada. Cuando juegas, lo que suceda está en tu mano. Pero las negociaciones las ves desde fuera y de repente suceden cosas difíciles de entender. Así que me alegro de que todo acabara bien.

—¿En qué momento tuvo usted claro que quería firmar por el Espanyol?

—En el momento en que se ponen en contacto conmigo, ya es una situación que me atrae mucho, por tratarse de un club que lleva muchos años en Primera y porque para mí supone un salto importante. Era justo lo que buscaba, dar ese paso para disfrutar de la Primera División después del año pasado haber saltado de Segunda B a Segunda A. Nos encajaba a mí y al Espanyol.

—En su web personal, escribe que el día de su presentación cumplió el sueño de su vida. ¿Qué sueños le quedan ahora por cumplir?

—En la vida hay que marcarse metas e intentar cumplirlas. Para mí, era muy importante ser jugador de Primera al cien por cien. No es nada fácil, por lo que me siento muy afortunado. Por ahora, no me he marcado un objetivo demasiado lejano: prepararme bien, encontrar mi mejor forma, aportar al grupo todo lo que pueda… Y luego intentaré ponerme otro tipo de metas.

—Lleva dos temporadas anotando más de 20 goles. ¿Y ahora?

—Las categorías están para algo, y se notará. Pero no tengo miedo a nada, tengo mucha confianza. Pero a día de hoy pienso en el primer gol, que será el más importante. Quiero ir paso a paso, de cara con todo.

Un sueño “El Espanyol es justo lo que buscaba: ser al cien por cien de Primera”

—¿Cómo se abstrae de la presión de ser el relevo de Gerard Moreno y, a la vez, el fichaje más caro en la historia del Espanyol? —Para mí es algo bonito, llevo con orgullo tanto lo de ser el fichaje más caro como el hecho de sustituir a un gran jugador como Gerard. Lo he hablado con él, somos amigos y me dio la enhorabuena; está encantado de que yo sea su relevo en el Espanyol. La presión la gestiono marcándome mis tiempos. Lo que nos rodea nos marca una exigencia difícil de sobrellevar, así que la confianza la ganas sin esa carga añadida, fijándote tus límites reales.

Objetivos “No tengo miedo a nada, y a día de hoy pienso en el primer gol”

—¿Qué le dijo Gerard sobre el Espanyol?

—Él me aconsejó que diese el paso. Me comentó que es un club muy familiar, donde iba a estar muy a gusto e iba a crecer. Me dijo que si me sentía preparado, fuera a por ello. Yo lo tenía claro, pero él me corroboró la intención. Nos mensajeamos mucho, siempre desde la admiración y el cariño mutuos. Si tenía alguna mínima duda sobre venir al Espanyol, Gerard me la resolvió en minutos. —¿Tal fue su convencimiento que, en plena negociación con el Espanyol, rechazó ir al Sevilla?

—Son situaciones que se plantean en el mercado. Existieron opciones, se habló, pero yo lo tenía muy claro. El verano anterior me sucedió algo parecido, con opciones distintas al Zaragoza pero había tomado la decisión. Cuando vienen otras ofertas, si estás convencido, difícilmente cambias de decisión. —Quién le diría todo esto cuando empezó jugando a fútbol sala como actividad extraescolar... —Sí, empecé muy pequeño, a los cinco años. Y hasta los ocho o nueve no probé el fútbol 7. Luego los compaginé durante unos cuantos años más. Aprendí muchísimo, teníamos mucha capacidad goleadora, y nuestro entrenador, Miguel Ángel Sanjiao, nos mimaba pero era muy exigente: por ejemplo, si el resultado ya era abultado a nuestro favor, nos obligaba a emplear la pierna menos hábil. Son detalles que te parecen tonterías pero que interiorizas y te sirven de profesional. —¿Cómo se gestó su sobrenombre de ‘Panda’? ¿Fue con una canción, no? —De ahí partió, de una concentración (del Celta B) en que estábamos aburridos y dimos en Youtube con una canción (de Desiigner), que se llamaba así, ‘Panda’. Nos acabamos llamando el ‘Panda Team’, y he tenido la suerte de haberme quedado con ese apodo. Es algo bueno, porque sirve para no olvidarme de un gran grupo y de una temporada, y así de paso tampoco me olvido de dónde vengo y de lo que me ayudaron.

El Sevilla “Existieron opciones, pero yo tenía muy claro mi fichaje por el Espanyol”