“A Carolina le cambió la mirada antes del Mundial”
La campeona llegó a España junto a su equipo, que analiza su gesta
Carolina Marín fue ayer homenajeada en Madrid por su tercer Mundial, ese que la ha convertido en la mujer más laureada de la historia del bádminton. El equipo que le acompañó durante el torneo en Nanjing dio su visión de cómo se gestó la hazaña.
No conozco a nadie capaz de hacer lo que ha hecho Carolina Marín: venir de una racha tan negativa y lograr volver a ganar de esta manera”, explicó ayer Fernando Rivas, entrenador de la tres veces campeona mundial de bádminton. La historia de la onubense en el último Mundial de Nanjing es la de la campeona caída que logró volver a levantarse para hacer historia con su tercer oro. Un hito que, como repite constantemente la jugadora, habría sido imposible sin su equipo.
Ayer, en la recepción que María José Rienda, presidenta del CSD, le ofreció en Madrid, le acompañó el grupo de personas que trabajaron codo con codo con la andaluza en China. Fernando Rivas, su segundo Anders Thomsen, el asistente Ernesto García y el fisioterapeuta Diego Chapinal son una parte clave (Carolina también se acordó de María, psicóloga) de los éxitos de una jugadora que, como Rienda destacó, “ha vuelto a dejar a todos con la boca abierta”.
Cambio. Entre los detalles que se revelaron, Rivas destacó el momento en el que supo que Carolina sería campeona en China. Precisamente, en uno de esos momentos complicados que pasó durante la preparación, tras caer en cuartos de Malaisia a un mes del Mundial, y precisamente ante Pusarla Sindhu, a la que acabó barriendo en el partido por el oro: “Tuvimos una charla muy profunda sobre lo que debíamos cambiar. Ella estaba muy tocada. Pero en ese momento le cambió la mirada y le dije a Anders Thomsen que ganaríamos en China”.
Homenaje
Rienda aseguró: “Ha vuelto a dejar a todos con la boca abierta”