De Arriba: “Mi cabeza sólo piensa en ganar”
El salmantino avanzó por tiempos; Ordóñez, fuera
Una semifinal de 800 siempre es una guerra incierta y ayer se llevó por delante a Saúl Ordóñez, que venía con la mejor marca europea del año (1:43.65), pero dejó con vida a Álvaro de Arriba, un salmantino que pasó por tiempos y que viene avisando que tiene “una carrera muy buena en las piernas”. “En la semifinal me crispé cuando vino el polaco, que me asustó. Por eso no estuve tan fino en la última recta. Pero estoy muy fuerte”, dice De Arriba, de 24 años y apodado Capitán Salamanca por su parecido con Chris Evans, el actor de Capitán América.
De Arriba partirá sin complejos en la final.
A por todas. “Me he entrenado para esto, para correr tres carreras en tres días y para acabar en 25 segundos los últimos 200 metros. He estudiado todo mucho. Tendré que vigilar más la cabeza, pero ahora empezamos todos en igualdad de condiciones”, sigue Álvaro, que no renuncia a nada: “En mi cabeza está el oro, luego ya se verá lo que sucede”. Ese es el plan que ha diseñado con su entrenador Juan Carlos Fuentes, “el de toda la vida” que le ha llevado a la élite internacional afinando su rush final innato y mejorando su resistencia ante la fatiga aguda.
De Arriba también tiene una cuenta pendiente con los grandes campeonatos porque en los Mundiales indoor de Birmingham llegaba “fortísimo” y un desafortunado catarro le dejó KO. “La realidad es que no subí al podio”, dice. Y sí fue bronce Ordóñez, cuya irrupción ha hecho crecer a De Arriba: “Esa rivalidad, y la que hay con Dani Andújar (también eliminado ayer), nos está haciendo mejores y te hace salir a campeonatos así, como en casa. Porque te acostumbras a competir a ese nivelazo”.
La final tendrá un nivel altísimo con el francés Pierre Ambroise Bosse, un excéntrico atleta que se coronó campeón del mundo en Londres con una táctica casi suicida. Más sobrio es el polaco Kszczot, especialista en los metros finales. “Él para mí es la referencia a nivel europeo y mundial. Es un hombre muy difícil de ganar”. Dos polacos más, Rozmys y Borkowski, escoltarán a Kszczot. Y un cazarecompensas danés llamado Andreas Bube también anda suelto. Una nueva batalla de 800, donde si eres superviviente tienes opciones de todo. Y ahí está De Arriba. El Capitán Salamanca sueña con su gran carrera, una que sea de oro.