Paco López y Machín, con las dudas en el horizonte

El que pierda hoy en el Ciutat pasa del bache a la crisis

Yes que el fútbol ya no es lo que era. Esto de la pelotita se ha convertido en tal vorágine que en apenas cuatro partidos ya da tiempo a hablar de crisis, de ultimátums y de cuerdas flojas. ¡En solo un mes! No es el caso de ninguno de nuestros dos protagonistas. Pero cuidado, que todo lo que no sea ganar hoy en Orriols a cualquiera de los dos lo traslada del bache a la crisis. Y de ahí al tembleque sólo hay un paso. O como mucho dos.

En eso se ha convertido el fútbol ahora. Casi no deja tiempo a nada. Ni a disfrutar. Ni a lamentarse. Abole su propia ley de memoria histórica sin tiempo siquiera para saborearla. Ahí sí que coinciden Levante y Sevilla. O Paco López y Machín. Dos técnicos que salieron por la puerta grande hace menos de cinco meses si cabe. Y ahora, aunque un poco de fondo, están en entredicho. Quizá no tanto. Pero sí cuestionados. Más por la opinión pública que por sus jefes. Pero al final la crítica es la crítica. Venga de donde venga.

Peor lo lleva Machín, que parece no encontrar acomodo a su 3–5–2 en el Pizjuán. El Getafe le pintó la cara. Y el derbi aún le escuece. Aunque cual Doctor Jekyll se diera una alegría en Europa goleando al Standard. De ahí, más dudas incluso. ¿Qué Sevilla toca hoy? ¿El de la manita europea o el de los tres últimos partidos de Liga sin ver puerta? Parece que algo de gol se ha perdido por el camino. Ese gol que le podría haber dado Borja Mayoral si no hubiera cambiado de rumbo el pasado 31 de agosto.

En Orriols lo recibió un Paco López al que con el paso de los partidos se le va diluyendo el aura milagrosa. Lo normal, vamos. Y el que no lo tuviera claro igual debería reflexionarlo antes. Lo que hizo en su estreno estaba fuera de lo normal. Ahora es uno más de los mortales. Todavía con crédito. Mucho diría yo. Se lo ha ganado. Y aún ganará más fiel a su estilo. Atrevido. De tú a tú. En el Levante... Y es que el fútbol, ¡qué bonito!, ya no es lo que era.

Arranque Levante y Sevilla llevan tres partidos seguidos sin ganar en la Liga