El Reus no paga a tiempo y pierde a cinco jugadores
Badia, Villanueva, Vítor, Moore y Carbia ya son libres
La situación en Reus empeora cada día que pasa. Ayer se cumplieron todos los pronósticos y la comisión conjunta de LaLiga y AFE acordó dejar sin efecto los contratos de los cinco futbolistas que se habían acogido al procedimiento abreviado para denunciar al club: Édgar Badia, Mikel Villanueva, Vítor Silva, Shaq Moore y Fran Carbia son desde ayer futbolistas sin contrato y, por lo tanto, pueden firmar por cualquier equipo. Los otros dos jugadores que no han cobrado, Querol y Olmo, no denunciaron al club hasta ayer, pues todavía dieron más margen a la directiva para pagarles las tres mensualidades adeudadas. Esa paciencia se ha acabado y si no cobran antes del día 5 de enero (LaLiga y la AFE se reunirán el 8) seguirán el camino del resto de sus compañeros y estarán en el mercado. Esta situación deja a la plantilla ahora mismo con 13 fichas profesionales (dos son porteros) a la espera de lo que pase con Olmo y Querol. Podrían quedarse once.
El Reus no tendría a priori ningún impedimento reglamentario para seguir compitiendo (la única condición es que alinee a siete profesionales, algo que podría seguir haciendo) pero el futuro de la entidad a corto plazo está muy tocado. En primer lugar deportivamente, pues con 13 jugadores en el mejor de los casos, es prácticamente imposible que el equipo logre la permanencia. En segundo, porque no está nada claro que acaben siendo 13: más allá de los casos de Olmo y Querol hay jugadores con la nómina al corriente que quieren salir de la entidad. Además, operativamente, el funcionamiento del Reus es complicado: con un presidente dimitido y un máximo accionista ausente, ningún trabajador de la entidad ha cobrado las mensualidades de septiembre, octubre y noviembre. Y eso incluye al cuerpo técnico.
Una situación absolutamente insostenible a largo plazo y que está por ver cuanto aguanta al corto. De cualquier manera, el futuro del club está hoy mucho más negro que hace diez días, cuando la entidad se comprometió a pagar a todos y abonó las nóminas de once futbolistas del primer equipo. Sin embargo, el resto del dinero no ha llegado.