Sporting-Racing, partido trampa en El Molinón
Los locales están tocados tras caer en Las Palmas
La trayectoria descendente del Sporting en el inicio de la competición empieza a generar dudas en el nuevo proyecto rojiblanco.
La última visita del Racing a El Molinón en Segunda se produjo hace algo más de tres años, en las últimas jornadas de una temporada que acabó en ascenso a Primera para los gijoneses y en descenso a Segunda B para los santanderinos. El Sporting vuelve a recibir hoy con satisfacción al vecino cántabro, pero con la preocupación por la trayectoria del equipo de José Alberto. El rival, recién ascendido y espoleado por su contudente primera victoria en la categoría, llega dispuesto a llevarse un duelo que amenaza con convertirse en una trampa para los locales.
Credibilidad. La derrota en Las Palmas ha dejado tocada la credibilidad del nuevo proyecto sportinguista y el regreso del equipo a Gijón, alterado por las lluvias torrenciales en Barajas, ha complicado más las cosas. El equipo se entrenó ayer nada más aterrizar en Asturias, pendiente de los tobillos de Manu García y Damián Pérez.
La alineación que pueda presentar hoy José Alberto es toda una incógnita. De nuevo se esperan cambios. El técnico, que ayer dijo que aún no tenía decidido el equipo, estudia incluso cambiar de nuevo el sistema.
En el Racing, que llega crecido después de su victoria del martes (4-0) sobre el Mirandés, la primera del curso, queda por ver la apuesta táctica de Iván Ania. Empezó el campeonato iniciando al toque desde su portero, Luca Zidane, pero en el último partido apostó por un 4-42, con balones en largo sobre el altísimo, y muy rápido, Nuha Marong. No es descartable una solución intermedia (4-2-3-1), pero lanzando balones a los espacios para el hispanogambiano. La motivación hoy será la mejor arma de los racinguistas en su vuelta a Gijón.