Reinier y su entorno estudian español desde hace semanas
El sueño de Reinier Jesus (18 años), que se hizo realidad ayer por la tarde con el anuncio oficial de su fichaje por el Real Madrid, no es únicamente una ilusión de un chaval. También lo es de toda su familia, que esperaba el momento con las ganas de a quien le llega la oportunidad de su vida.
Seguramente quien mejor represente ese sentir sea su padre, Mauro Brasília. Mauro conoce muy bien lo que es el deporte de élite, no en vano lo ha experimentado desde dentro, y valora como nadie el precoz éxito de su crack. Él fue campeón del Mundo de fútbol sala con Brasil en 1985 en España, una disciplina en la que fue reconocido como el mejor de su país en 1983. En el nuestro residió tres años porque su carrera le trajo aquí.
El padre de Reinier es, además, el principal causante del madridismo de su hijo, al que de pequeño animaba a ver los partidos del club blanco. Más aún, le ponía vídeos de varios de los jugadores que levantaban al Bernabéu, entre ellos de Zidane, el que se espera que sea su entrenador a medio plazo. Por eso Reinier verá en Zizou algo más que un ‘jefe’: un ídolo al que imitó en sus primeras patadas.
Tantas ganas tenía la familia Reinier de que llegara la oficialidad del compromiso con el Madrid por lo que queda de temporada y seis más que Mauro no podía parar de presumir entre sus más allegados de un documento que le llegó a su teléfono móvil durante una espera que se les hizo eterna. Se trataba de una foto de su hijo vestido de madridista. Un primer plano, al estilo de las fichas que aparecen en la página web del club, con Reinier sonriente... y la camiseta de la temporada 2018-19, no la de la 201920. Mauro desconocía ese detalle, pero tampoco le importaba. Se le caía la baba imaginando al crack que él, como apoyo a los entrenadores de la cantera de equipos como Flamengo, forjó en base a su experiencia al más alto nivel del fútbol sala.
La familia de Reinier inició hace semanas los trámites que implican un cambio de país y de continente. Desde España, varias personas le asesoran en la búsqueda de una nueva vivienda en Madrid, donde aterrizarán cuando el futbolista concluya su participación en el Preolímpico de Colombia. Y se han puesto manos a la obra con el idioma, estudiando castellano en su casa de Río de Janeiro. Reinier, por su parte, con el mismo profesor que ellos, empezó a hacerlo en la concentración de la Sub-23 en la Granja Comary. Un talento y un chico aplicado...
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