Cargas, reventa y coronavirus en la previa de los wolves
Un detenido y cinco policías leves
La inmensa mayoría de los aficionados del Wolverhampton que viajaron a Barcelona exhibieron un comportamiento pacífico, ejemplar. Pero unas cuantas decenas empañaron en las horas previas la imagen de los ‘wolves’, si bien algunos también cuestionaron el trato policial.
Numerosos vídeos inundan las redes mostrando los enfrentamientos que un amplio grupo de ‘supporters’ y efectivos de la Guardia Urbana protagonizaron el miércoles por la noche en la Plaça Reial de Barcelona, en una escena que culminó con cargas. No obstante, testigos presenciales aseguraban en medios como el ‘Birmingham Mail’ que el ambiente era festivo hasta que hizo acto de presencia el cuerpo policial. Algunos aficionados se habían encargado muy cerca de allí, solo unas horas antes, de enganchar adhesivos sobre los maniquíes de la tienda que el Espanyol tiene en la Rambla. Los disturbios se saldaron con un detenido y cinco agentes heridos leves.
Otros seguidores del Wolverhampton adquirieron entradas para el partido de un modo ilícito, mediante la reventa. El Espanyol no solo lo ha detectado, sino que advierte que al tratarse de entradas nominales los aficionados de los Wanderers no iban a poder acceder al estadio y, además, el club sabrá qué socios se las han revendido para poder tomar con ellos las medidas disciplinarias oportunas.
Un tercer foco informativo ocupó las horas previas. Después de que en Catalunya se confirmaran tres casos de personas contagiadas por el coronavirus, el Wolverhampton advirtió a sus ‘supporters’ de que se movieran con precaución y cumplieran “cualquier medida adicional que solicitasen las autoridades locales”.
Disturbios La Plaça Reial asistió a una tensa escena entre ‘supporters’ y la Urbana