Así se gestó el fichaje
Abiteboul siempre consideró al español su primera opción. Necesitaban esperar a la incorporación de Luca de Meo
Ricciardo se quedó en Australia tras la cancelación del GP en marzo y se despidió de sus jefes de Renault hasta la siguiente carrera. A mediados de mayo llevaban más de un mes sin hablarse cuando descolgó el teléfono y le dijo a Abiteboul: “Me voy a McLaren”. Su evasiva no sorprendió al paddock, pero sí a la escudería francesa, que confiaba en su compromiso tras haber desembolsado cerca de 20 millones por cada temporada. De un día para otro, se quedaron compuestos y sin piloto.
Mientras, la crisis económica de la pandemia sacudía al fabricante francés, a la deriva desde la detención de su expresidente, Carlos Ghosn. Pidieron un crédito al estado francés de unos 5.000M¤. Desde hace meses se especulaba con el futuro del equipo en la F1 y la falta de liquidez avivó los rumores. La intermediación de Todt, presidente de la FIA, para rebajar el techo presupuestario de 2021 fue decisiva en la continuidad de Renault. Clotilde Delbos, máxima ejecutiva interina durante ese periodo, dio el visto bueno. El automovilismo pasó de ser un vicio caro, de 230M¤ por año, a una inversión publicitaria rentable: ninguna campaña tiene tal repercusión mundial por 150 millones y la F1, sí.
Para acompañar a Ocon, el primer nombre de Renault fue Alonso. Se sondeó a Vettel, que dejaba Ferrari y tiene buen cartel, pero el alemán no se postuló porque prefiere marcharse que subirse a un proyecto en construcción. Se ofreció Bottas, harto de ser el segundón en Mercedes y de que sólo le confirmen mientras no haya mejor opción. Y se miró a la academia, donde despuntaba el malogrado Hubert, pero el chino Zhou, en F2, está verde.
Así que se retomaron los contactos, a mediados de mayo, (en la F1 siempre hay conversaciones previas entre pilotos y jeves) con un Alonso que tenía clara desde marzo su intención de volver al Gran Circo. No hubo acuerdo de base, a la firma le pareció imposible asumir el caché del ovetense con la práctica totalidad de su plantilla en ERTE. Pero en las últimas dos semanas, con prisas, se pusieron manos a la obra porque Abiteboul quería evitar ir a fichar, en un par de meses, a la sección de últimas oportunidades. El pasado viernes aún no estaba cerrado al 100%, pero era cuestión de detalles. Si equipo y piloto tienen ganas de juntarse, es sencillo.
Opciones Los franceses sondearon a Vettel, pero el alemán no se postuló
Fechas A mediados de mayo, las negociaciones entre ambos fructificaron
Con acuerdo en la duración, dos años y una opción para la tercera, sueldo de estrella del deporte y la marca Kimoa dentro del paquete, Alonso exige claridad en el proyecto deportivo. Ha dicho, por activa y pasiva, que no volvería a la F1 para luchar por un 10º, la razón por la que se marchó de McLaren en 2018 cuando tenía todas las facilidades de Brown para renovar y disputar la Indy 500 cuando quisiera. Se entiende que los datos y las perspectivas que le enseñó Abiteboul le convencen. Era fundamental esperar a julio, porque el traspaso debía pasar por la mesa del italiano Luca de Meo, expresidente de Seat y actual máximo responsable de Renault. Y la idea, como al resto del panel de directivos, le convenció desde el principio.