Pinchi sonroja Riazor y el Depor impugna el partido
Denuncia ante Competición alineación indebida
El Deportivo tenía una cita importantísima para su futuro, para despedir una durísima temporada evitando sufrimientos extremos. Pues optó por lo opuesto, por verse de nuevo con el agua al cuello en un partido que tenía ganado a los cuatro minutos y que fruto de sus nervios, dudas y horrores que recordaron al inicio de Liga acabaron perdiendo. Imperdonable patinazo, sobre todo porque el rival venía recién descendido y con lo puesto, bueno más bien con menos. Un equipo plagado de chavales, de canteranos, que demostró una dignidad enorme para sacarle los colores a un Depor menguante que soñaba con cerrar la jornada con 51 puntos y que lo hace mirando al abismo. Todo un desastre multiplicado por el nombre del héroe del día: Óscar Pinchi. Un joven formado en la cantera blanquiazul que con su doblete en el tramo final deja los cimientos de Riazor temblando.
El lío. Hasta ahí el primer partido, porque hay un segundo ya que el Deportivo ha decidido reclamar ante el Comité de Competición alineación indebida. El Extremadura estaba con siete profesionales sobre el césped (lo mínimo que exige la norma) cuando en el minuto 68 Airam Cabrera salió del campo por un golpe. El juego se reanudó sin el tinerfeño, que regresó poco después. En ese lapso de tiempo sólo había seis futbolistas de la primera plantilla azulgrana y el Deportivo, necesitado hasta la asfixia de puntos, decidió impugnar el encuentro. La batalla legal está en el punto 2 del artículo 223: “Una vez iniciado el partido, los equipos deberán estar integrados, durante todo el desarrollo del mismo, por siete futbolistas, al menos, de los que conforman la plantilla de la categoría en que militan”.