AS (Catalunya)

El fortín del Di Stéfano

El Madrid se aferra a su imponente balance (15 puntos sin fallo) en su campo talismán de Valdebebas para certificar mañana su Liga 34

- POR TOMÁS RONCERO

El Madrid se juega mañana la Liga. Un triunfo ante el Villarreal en el Di Stéfano (21:00 horas) le daría de forma matemática el título de Liga a falta de una jornada. Los de Zidane no quieren dejar escapar esta oportunida­d de cerrar el alirón liguero y no esperar al partido del domingo en Butarque (21:00h.), ante un Leganés desesperad­o y necesitado que podría esa noche estar jugándose la permanenci­a.

Los números avalan el optimismo del madridismo para que no haya que esperar más y que este jueves pueda la afición madridista cantar victoria. Hasta ahora, el Di Stéfano se ha consolidad­o como un auténtico fortín, inaccesibl­e para los rivales que se han acercado por allí. Desde que volvió la Liga tras el confinamie­nto, el Madrid ha jugado cinco partidos en su nuevo campo, con un balance impecable. Cinco victorias, 11 goles a favor y sólo un gol encajado.

Estos fueron los resultados acumulados en el postconfin­amiento jugando como local la tropa de Zizou: 3-1 al Eibar (goles de Kroos, Sergio Ramos y Marcelo), 3-0 al Valencia (dos golazos de Benzema y uno de Asensio en su regreso), 2-0 al Mallorca (Vinicius y Ramos, con un lanzamient­o magistral de falta), 1-0 al Getafe (Ramos, de penalti) y 2-0 al Alavés (Benzema, de penalti, y Asensio).

Unos números que reflejan la confianza de los pupilos de Zidane es este estadio Alfredo

Di Stéfano, pese a tener sus 6.000 localidade­s vacías por la pandemia, pero en el que se sienten cómodos y seguros. De hecho, en el Bernabéu se habían dejado ocho puntos en lo que iba de Liga antes de la suspensión, como reflejan sus cuatro empates ante Valladolid (1-1), Betis (0-0), Athletic de Bilbao (0-0) y Celta (2-2).

Sin duda, el impecable estadio donde habitualme­nte juega el Castilla de Raúl se ha convertido en el escenario idóneo para que este jueves el Madrid cante a pulmón el “¡Campeones, campeones!”. El broche de honor lo pondría Luis Rubiales, presidente de la RFEF, que entregará la copa a Ramos si se consuma el 34º alirón. En Málaga, en 2017, Modric y Bale no entendían que no hubiese entrega del trofeo. Esto ha cambiado. Para bien.

Rubiales Si gana el partido y logra el título, el presidente de la FEF les dará el trofeo

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Panorámica del Di Stéfano antes del partido que el Madrid jugó con el Eibar a la vuelta del fútbol.

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