Beatriz González “Ganar un torneo del WPT sabe muy rico”
La malagueña Beatriz González se convirtió en el Madrid Open en la más joven en ganar un torneo profesional del WPT. Al lado de Marta Ortega, esta adolescente de 18 años entró en la historia del pádel.
No había público en la final femenina del Madrid Open del pasado domingo, pero los aficionados al pádel no se perdieron el partido por televisión: era la primera final del World Pádel Tour (WPT) en la que aparecía Beatriz González (Málaga, 18 años). Y triunfó. De esa manera batió el récord de precocidad que tenía Ari Sánchez desde el Open de Santander, cuando levantó el título con 19 años. Como curiosidad, la final de Madrid resultó muy parecida a la de Cantabria, porque Ari ganó con Marta Ortega, la compañera actual de Beatriz, y la pareja derrotada en ambas ocasiones la formaban Eli Amatriaín y Patty Llaguno.
—Tras ganar la final de Madrid se le notó emocionada, incluso con un trato muy afectivo con las perdedoras. —Era mi primera final, y frente a dos jugadoras a las que tengo un enorme cariño, porque ellas, las dos, me han ayudado mucho. Cuando vine a vivir a Madrid ambas me acogieron y se preocuparon de que estuviese bien. De alguna manera fueron las que me contaron cómo son las cosas en el World Pádel Tour.
—Lleva desde los 15 peleando en la competición profesional, incluso fue elegida la jugadora revelación de 2018. Siempre al lado de argentinas. —Paula Eyheraguibel, Nela Brito y Cata Tenorio eran veteranas y expertas. El año pasado acabé con Delfina Brea, que es joven como yo, y hacíamos una buena dupla. Me costó muchísimo romper con ella, pero me llamó Marta Ortega, que ya no seguía con Marta Marrero, y valoré mucho su propuesta. Es una de las mejores del mundo, muy joven (23 años) y con un proyecto a medio y largo plazo. Creo que nos va bien, que ahora tengo al lado a una española que es como yo.
—Lo que está claro es que no tiene miedo a pegarle a la bola, aunque falle.
—Soy una jugadora agresiva y confío en mis tiros: pese a que falle alguno, sé que van a entrar y a causar daño.
—¿Por qué juega usted al pádel?
—La culpa es de mi padre, ya que él practicaba con sus amigos en un club que está frente a nuestra casa en El Palo. Y claro, venga verle, le pedí a mi madre que me apuntase. Y aquí estoy.
—Decidida a ser la número uno del mundo, por lo que veo. —No corre prisa. Estudio INEF por la mañana y me entreno por la tarde. Así cada día. —¿Sólo eso y en Madrid? —Vine a Madrid porque es la capital del pádel, y me encanta vivir en esta ciudad, aunque con este calor echo de menos la playa. También me dedico a cosas de mi edad, y estoy aprendiendo a tocar la guitarra y el cajón flamenco. Vamos, que el tiempo cunde mucho si te organizas bien.
—En una semana, otro torneo y en Madrid. Ahora Marta Ortega y usted tienen la presión de defender un trofeo.
—No jugaremos con esa presión, porque sabemos que hay mucha igualdad entre todas las parejas y nadie tiene el triunfo asegurado. Ahora bien, saldremos a ganar, porque desde que lo consigues en una ocasión notas que la victoria sabe muy rica. Eso sí, lo primero será hablar con Ari, que no se moleste por quitarle su récord.
Juventud “No tengo miedo a fallar, soy agresiva y confío en mis tiros”
Solo tres grandes competiciones, la ACB, la Liga alemana y la de Israel, en la que hoy arrancan las semifinales (Maccabi-Galil Gilboa y Hapoel Jerusalén-Rishon), se han reanudado en Europa tras el parón forzado por el coronavirus. La NBA volverá el 30 de julio y la CBA, la Liga de China, lo hizo el 20 de junio, con dos grupos de diez equipos en dos sedes, una en Qingdao, en el este del país, y otra en Dongguan, en el sur. La CBA ha innovado mostrando a aficionados, que seguían los partidos fuera del pabellón, en los videomarcadores y hoy dará un paso más: vuelve el público a la grada de manera muy restringida en una experiencia piloto antes de abrir las puertas a los seguidores en los playoffs, que empezarán el 31 de julio.
La competición permitirá en dos encuentros que se juegan hoy por la tarde en China que se adquieran localidades, aunque únicamente podrán hacerlo los profesores, el personal médico y la policía. Si todo sale bien y la prueba resulta positiva, la CBA se convertirá en la primera Liga profesional con aficionados en las gradas. Lo veremos
Los aficionados en China deberán pasar una prueba del coronavirus 48 horas antes
a partir del próximo viernes, con el inicio de las eliminatorias por el título en Qingdao, en el pabellón conocido como El Diamante. Entonces, se levantarán las restricciones por profesiones y cualquiera podrá comprar una entrada si ha dado negativo en el test del coronavirus en las 48 horas anteriores al encuentro. Además, se realizarán controles de temperatura a los asistentes, la mascarilla será obligatoria, solo accederán los mayores de 12 años y no podrá romperse la distancia social de al menos un metro, que se deberá mantener también a la entrada y a la salida. Así mismo, se creará un registro con los números de los documentos identificativos de cada seguidor.
Una nueva normalidad que ha empezado a experimentarse en Europa, en el torneo amistoso de selecciones que se disputa desde el viernes en Tallin, capital de Estonia, y que pasará por Letonia y Lituania, los tres países bálticos. El estreno ha sido en el Saku Suurhall de Tallin, que con capacidad para 10.000 espectadores ha reunido a unos 1.500. En la pista, varios jugadores ACB: Vene, Sedekerskis, Birutis, Raieste… Un poco más cerca del baloncesto que conocíamos.