AS (Catalunya)

Carlos Sainz “Mi apuesta, sin duda, es Ferrari”

- JESÚS BALSEIRO

En Barcelona, antes del GP de España, Carlos Sainz habla en exclusiva con AS sobre la temporada con McLaren y el futuro que le espera en Ferrari: "La vida te da victorias cuando te dejas la piel, como yo, en cada carrera"

Cansado después de una jornada larga en Barcelona, pero con ganas de charlar sobre carreras y escuderías de leyenda. Carlos Sainz habla en exclusiva con AS en el GP de España. El madrileño, de 25 años, se sobrepone a un inicio de temporada irregular con el McLaren, azotado por factores externos. Independie­ntemente, se marchará de Woking como capitán general. Al fondo le espera el desafío de Ferrari, desde 2021. “Apetece”.

—¿Qué tal el día? —Complicado. Barcelona no es nuestro mejor circuito, se atraganta el último sector y aunque a una vuelta no hemos ido mal, en carrera nos cuesta. Lo sabíamos antes de venir y quizás toca sufrir el domingo. —Parece un GP de España extraño. Sin público, en agosto, con varias carreras detrás...

—Sí, estoy de acuerdo. Aquí llegábamos frescos después de Asia y dábamos la bienvenida a la F1 en Europa, con el público. Es un GP de España más triste, no hay nadie en el circuito, no sientes ese apoyo más allá de las redes sociales. —Con este ritmo, ¿da tiempo a corregir los problemas?

—De semana a semana, no. Hasta ahora no hemos podido resolver el problema de la semana pasada (con la refrigerac­ión del McLaren) e intentarem­os resolverlo antes de la clasificac­ión. Echaremos el resto, no me gustaría salir con el coche todavía más caliente.

—Y del otro problema, ¿qué pensará el domingo cuando entre a cambiar neumáticos?

—Intentaré no pensarlo, hay que confiar en que todo va a salir bien. El equipo, créeme, está haciendo todo lo que puede para mejorar la situación de los pit stop y que no ocurra lo que ya me ha ocurrido tres veces. Sabemos que es una asignatura pendiente, pero psicológic­amente yo no puedo preocuparm­e por eso.

—El año pasado no perdió la confianza con los tres ceros del inicio de temporada. ¿Ahora? —Este año, en ese sentido, el campeonato está muy complicado por todos los puntos que hemos perdido. Haciendo números, calculé 26 puntos. La confianza intacta, pero la rabia y la frustració­n es más alta porque es una temporada corta y las carreras valen más. —¿Cuál es su objetivo en 2020? —Si sumase esos puntos que me faltan, estaríamos terceros en el campeonato (de fabricante­s) y sería un año muy bueno para el equipo. Pero estamos siempre entre el cuarto y el sexto coche. El campeonato, a medida que avance el año, nos pondrá en nuestro sitio. —Decía Andreas Seidl en una entrevista con AS que usted ha sido imprescind­ible en la recuperaci­ón de McLaren.

—Yo no utilizaría la palabra imprescind­ible porque nadie lo es. Pero sí puedo decir que he ayudado en todo lo que he podido desde noviembre de 2018. Sé que se me ha tenido muy en cuenta y yo lo agradezco, se debe dar confianza al piloto. —¿Qué piloto quiere Ferrari? —Lo saben desde el principio porque me han analizado, como piloto y como persona. Saben lo que puedo aportar, pero debo ponerlo en práctica y entonces ya te dirán ellos lo que puedo aportar. No quiero hablar pronto, prefiero esperar a que pasen las cosas. Hay ganas de eso, muchas, pero también de acabar el año bien con McLaren. —¿Qué siente un piloto cuando puede elegir entre Ferrari y McLaren Mercedes, los equipos ganadores de su infancia? —Imagínate... Mucho orgullo, quién me iba a decir a mí hace diez o quince años que este invierno podría firmar por Ferrari o elegir entre McLaren Mercedes y Ferrari. Nadie en mi familia, ni yo, que era un poco iluso, me esperaba encontrarm­e en esta situación. Muy contento, aunque no lo parezca después de cinco carreras tan frustrante­s, todavía estoy contento de lo bien que han ido estos años de F1. Ahora, a seguir empujando y haciendo las cosas bien. Consiguien­do estas mini victorias que te da la vida cuando haces las cosas bien y trabajas duro, y te dejas la piel como me la dejo yo en cada carrera, en cada viaje, en cada sesión de simulador. En cada entrenamie­nto. En todo lo que hago doy el máximo. —Leclerc lleva un segundo, un tercero y un cuarto puesto. Viendo el vaso medio lleno, el 'mal' Ferrari aspira a podios… —Leclerc está haciendo un añazo y compensa lo que le falta al Ferrari, lo está poniendo él. No creo que estén contentos en Ferrari, estaban haciendo poles en 2019 y ahora se quedan a más de un segundo de Mercedes. Pero pasa igual en McLaren, Renault o Racing Point, nadie está contento. Hay mucho trabajo que hacer en todos los equipos si alguno quiere molestar, siquiera, a Mercedes. —¿Le atrae el reto de Leclerc? Está asentado en Ferrari.

—Me apetece el reto de Leclerc y el reto de Ferrari, en sí. Pero sé que voy a llegar a un equipo en el que él está establecid­o y metido dentro. Se sabe el coche a la perfección, los set-up, cómo reacciona a la rueda nueva en clasificac­ión y en carrera, las vueltas de después de los pit stop, la gestión de los neumáticos, la gasolina… todos los trucos que hay en la F1 para extraer décimas me los tendré que aprender de cero el año que viene contra un piloto que se los va a saber todos. Eso me llevará un tiempo. Pero una vez consiga ir cómodo, como voy con el McLaren, si lo consigo, y una vez me acostumbre y me aclimate al equipo, puedo esperar cualquier cosa. —En la vida de un piloto de F1 es fundamenta­l elegir al equipo correcto en el momento adecuado. ¿Es Ferrari su apuesta para ser campeón? —Sí, Ferrari es mi apuesta, sin duda. La apuesta de Ferrari es atractiva para cualquier piloto y si nos fijamos en la pura estadístic­a, a Ferrari le toca ganar. Espero que pronto, y ojalá yo sea parte de ese periodo de victorias. La Fórmula 1 hoy está dominada por Mercedes y quitarles de esa posición será muy difícil. No es un secreto. Pero Ferrari es el sitio ideal para mí en los próximos dos años y acepto el desafío, quiero ser un piloto Ferrari. —¿Qué es lo que más le motiva del futuro que le espera? —No lo sé. La gente que ha estado allí me habla mucho de lo que es ser piloto de Ferrari, de sentir el apoyo de los tifosi en Monza. Yo prefiero no tener expectativ­as, que todo pase, vivirlo por mí mismo.

—Gracias y buena suerte.

—A ti, muchas gracias.

Perdimos 26 puntos, la confianza está intacta pero hay frustració­n y rabia”

Leclerc pone lo que le falta al Ferrari, está haciendo un ‘añazo’ y es un desafío”

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