Dinho ‘fichó’ a Gabriel para la Juve

■ Gabriel le debe mucho a Ronaldinho. Para ser concretos, le debe su fichaje por la Juventus. Palabras mayores. Con apenas 17 años, el ahora mediocampista del Leganés cumplió un sueño. Aquella tarde del 13 de febrero de 2011 su equipo, el Resende, visitaba al Flamengo del Gaucho. Ronnie apenas había disputado tres partidos tras retornar a Brasil. Todos los focos le apuntaban. Nadie sabía que las cámaras acabarían enamorándose de Gabriel. Días antes, su entrenador le encomendó una delicada misión: marcar a Ronaldinho. “No me lo podía creer”, confiesa Gabriel. Recién ascendido al primer equipo, le tocaba frenar a su ídolo. En el césped la veneración desapareció. “Fui su sombra”, describe. “Un par de veces me vaciló. Quería que le dejase jugar. No le hice caso”. Tal fue la tortura, que la frustración se hizo carne en Ronaldinho y acabó dando una tarascada a aquel imberbe insolente. “Debo ser de los pocos a los que ha dado una patada”, se carcajea. Obsesionado con su tarea, a Gabriel se le olvidó pedirle la camiseta durante el choque. Los periodistas engulleron al astro y la preciada zamarra jamás llegó a su poder. Poco importaba. Había cambiado su vida. La Juve vio la exhibición y, desde entonces, empezó a seguirlo. Meses más tarde los bianconeri concretaron su fichaje.