El Oporto se suicida y la Juventus se ve en cuartos
Los portugueses, con diez desde el 27’, resistieron hasta el 72’
Si la disciplina táctica iba a ser la clave de la eliminatoria, Alex Telles se encargó de despejar las dudas. La expulsión del lateral del Oporto en el 27’ puso en bandeja el pase a la Juventus que sin prisa, apretando minuto a minuto, impuso su calidad, su variedad de recursos, su físico y su disciplina.
Es difícil que un árbitro saque dos tarjetas al mismo jugador en dos jugadas seguidas, pero la torpeza de Telles lo hizo posible. Dejó a su equipo a merced de la Juve que, sin variar su táctica, pasó a dominar. Hasta entonces, la pelea era en el medio, con un Oporto muy agresivo y faltón, sorprendente en artistas como Brahimi (qué gran reconversión) o Rúben Neves, con lo que mantenían a raya a su rival.
Pero la expulsión de Telles descompuso al equipo. Una buena intervención de Casillas y el poste, a tiro de Dybala, impidieron que en la primera parte el campeón italiano se fuera con ventaja en el marcador; pero parecía que era cuestión de dejar madurar la fruta para cosechar.
En el minuto 71, maduró. Un rebote fue aprovechado por Pjaca, que acababa de entrar; dos minutos después, otro jugar de refresco, Alves, remachó la victoria. No hubo más goles porque la defensa del Oporto, sobre todo Marcano y Felipe, mantuvo la compostura, Higuaín no tuvo su día y la Juventus no varió un ápice su dibujo. Dos goles son más que suficientes para Turín, para qué esforzarse más. Ya se ve en cuartos y, verdaderamente, al Oporto no se le ve con fuerzas para realizar una proeza.