El ejemplo de aquel Milán de Sacchi
He escuchado muchas opiniones en relación a la necesidad de que el Madrid disponga de un modelo y estilo futbolístico solvente, serio y, sobre todo, ganador. Muchos opinan (no sin cierta razón) que ahí está el ejemplo del Barça de Guardiola de una gestión estrictamente deportiva con fines eminentemente deportivos.
Falta muy poco para que se cumplan 30 años de aquel fabuloso equipo que asombró a Italia (revolucionando todos los conceptos tácticos), a Europa (logró el máximo entorchado durante dos temporadas consecutivas) y al mundo, ganando también dos Intercontinentales. Me refiero, claro que sí, al gran Milán de Sacchi. Demostró que, a excepción de Van Basten, los extraordinarios jugadores también pueden zafarse en labores de contención, igualmente importantes para ganar partidos y títulos. Con un mínimo de posesión de balón puedes mantener ese nivel de presión. De hecho, hoy todavía lo siguen haciendo la inmensa mayoría de los equipos medianamente organizados en defensa.
Y creo que debería ser el modelo a seguir. Pero he de reconocer que aquella obra de ingeniería futbolística sólo está al alcance de jugadores dispuestos a mantener la seriedad, atención-concentración (sobre todo en tareas defensivas,
haciendo el fuera de juego, achique de espacios, presionando constantemente como un acordeón) durante todo el partido. Los actuales Bale, Benzema y Ronaldo no pueden mantener esos niveles de desempeño, ni siquiera durante media parte, al margen de que Ramos tampoco es Baresi para hacer labores de libre-central. Me temo que los intereses crematísticos de Florentino se volverán a imponer, y tampoco veo a Zidane como a un genio táctico.
José Martínez Cano Madrid