Ayuda para los árbitros ante los tramposos

Hemos llegado a tal punto en el fútbol que los árbitros se han convertido en el continuo centro de la diana. Esto no puede seguir así. Necesitan una ayuda. Y como nadie colabora en que esto cambie, tendría que ser en forma de tecnología. Mediante la visualización de las jugadas repetidas por vídeo se acabaría con las trampas. Ese vídeo que dejaría retratado a más de uno.

Que se ponga al tramposo en el videomarcador del estadio, ese actor de teatro que cae como fusilado al suelo sin que haya sufrido el más leve contacto. Y aquel que finja ser objeto de agresión, que sea duramente castigado. Que los espectadores lo señalen. El partido seguiría su ritmo, sin quejas, sin lloros y sin lamentos. ¿Qué mejor ritmo de juego que durante la semana no se continúe con las luchas de barrios de a quién han beneficiado o perjudicado más?

Se ayudaría a los árbitros a tener menos presión si hubiera unas cabinas aisladas del público donde otros árbitros vieran las jugadas repetidas. Ese vídeo otorgaría la pureza con la que se diseñó el fútbol. Ese deporte donde 22 personas corrían por el barro detrás de un balón de esparto, sin saber de reglas, ni importarles la figura del árbitro. Recuperemos esa esencia. El futbol lo necesita. Alberto Ginés

Madrid