El triunfo de Valverde puso fin al esperpento
El Movistar se desquitó tras la rectificación de los jueces en la Volta
Alejandro Valverde, con los brazos en alto celebrando su triunfo en la meta de La Molina. Ese fue el recurrente final (victoria 101ª del murciano) de una esperpéntica jornada en la Volta a Catalunya que arrancó a primera hora con la polémica crono por equipos del día anterior aún coleando. El Movistar conocía antes de la salida que los jueces rectificaban su decisión tras los supuestos empujones (“toques” para el equipo español) que habían desatado el conflicto: lo que el martes fue una sanción exclusiva para los implicados Rojas, Amador y Oliveira, se convertía un día después en un castigo de un minuto para todos los miembros del equipo. Una decisión más acorde con lo que dicta el reglamento de la UCI... pero aplicada bastante tarde.
Para colmo, esa resolución, propiciada por las reclamaciones del BMC y Trek, lo cambiaba todo. El Movistar perdía su triunfo en la crono, que pasaba a manos del BMC, y el maillot de líder que ya el martes había sido de Rojas y luego de Valverde, se lo enfundaba Hermans, belga de la escuadra norteamericana, que al final de la jornada retendría el liderato con su jefe de filas, Van Garderen.
Con este panorama arrancaba una etapa con recorrido montañoso y final en alto. El Sky de Froome y el Trek de Contador fueron los que más empeño pusieron en tensar el ritmo en la ascensión final. El problema es que “no era demasiado exigente y con el viento de cara que había, era muy fácil ir a rueda”, explicó luego el de Pinto. Consciente de ello, Valverde esperaba su oportunidad, arropado por el joven Marc Soler, colmado luego de elogios.
Una conclusión que se resolvió en un pulso entre Valverde y el irlandés Dan Martín. El último kilómetro lo lanzó Adam Yates (su Orica también lo había probado con Verona) y a 200 metros de la llegada, Martin saltó del grupo de cabeza. Lo hizo con mucha fuerza, pero Valverde no iba a fallar en uno de esos finales que tan bien se ajustan a sus características. Se puso a su rueda y le superó, apenas a 30 metros, por la izquierda. El murciano no hizo gestos, sólo lo celebró, pero luego dejó muy claro que no se le había ido de la cabeza la crono y la decisión final de los jueces. “Lo mismo me quitan esta victoria también”, soltó ante los periodistas sonriente.
Nuevo líder. El murciano se coloca cuarto en la general (Froome quinto y Contador séptimo), pero aún a una distancia considerable del nuevo patrón de la carrera, el estadounidense Van Garderen, curiosamente uno de los primeros en denunciar el día anterior al Movistar, y al que los jueces acabaron dando la razón... después de demasiadas vueltas.
Nuevo líder Van Garderen cuenta con una buena renta sobre el resto de los favoritos