El Madrid tiene un gran desafío: ganar en Turquía
“No podemos depender siempre de los canastones de Llull”, dice Rudy
El Madrid se la juega en Estambul. Seis derrotas en sus últimas siete visitas, incluidas tres este curso ante el Galatasaray, el propio Darussafaka (81-68) y el Fenerbahçe. Para que el Real vuelva a la Final Four tras un año de ausencia tiene que vencer sí o sí hoy o el viernes en Turquía y forzar el quinto duelo. Este se jugaría en el Palacio el martes 2 de mayo, el mismo día del Madrid-Atleti de la Champions. Si gana los dos, eso sí, tendrá un problema menos. No parece fácil.
Los blancos son aún favoritos en las apuestas, pero han caído a la tercera plaza en la lucha por el título tras el CSKA y el Fenerbahçe. Después del primer partido en Madrid, Blatt dijo que sabía lo que había que hacer para vencer. Su equipo lo bordó. Ahora, en el discurso de los jugadores madridistas hay frases que se repiten casi como un mantra. Conocen la fortaleza del enemigo y saben en qué han fallado. Por ejemplo, en la defensa del punto fuerte adversario, el uno contra uno de un grupo liderado por Wanamaker que rompe por talento (el suyo, el de Wilbekin, Clyburn, Anderson…), pero que no da muchas asistencias.
“Nos faltó dureza y concentración de salida”, reconoce Ayón. “Tenemos que defender mejor para encontrar el ritmo”, ha dicho Laso que tiene la duda de Thompkins (lumbalgia). Y en ataque, también está clara la teoría. “No hay que obsesionarse con sus cambios defensivos que nos obligan a forzar tiros. No podemos depender siempre de los canastones de Llull”, asegura Rudy. Trampas atrás para cortar la circulación del balón. La respuesta: “Ser un equipo”, apunta Ayón. Tercer capítulo con un 1-1 angustioso.