El VAR disipa dudas con su buen uso entre los Sub-20
Ha corregido errores y se ha cotidianizado en el Mundial
EI banco de pruebas que para el VAR está siendo el Mundial Sub-20 que se disputa en Corea del Sur estos días puede considerarse, al menos de momento, un éxito. El videoarbitraje se ha utilizado correctamente entre las mejores promesas de la categoría. Jugadores, técnicos, espectadores y árbitros conviven con el nuevo sistema, que ha conseguido colarse en el torneo sin demasiada intromisión.
El VAR se ha utilizado puntualmente y siempre para impartir justicia. Y, lo más importante, ha conseguido verse como algo normal. Incluso uno de los argumentos que más críticas genera contra el sistema, el de la tardanza entre que se detiene el juego y se reanuda, se está puliendo también.
Hasta el momento han sido cinco las veces en las que se ha tenido que hacer uso del VAR en los 20 encuentros que se llevan disputados. En las cinco se corrigieron acciones decisivas que habían sido mal arbitradas. En el Uruguay-Italia de la primera jornada se concedió un penalti a favor de los uruguayos, que sin embargo lo acabaron errando.
En el Venezuela-Vanuatu el VAR apareció en dos ocasiones. La primera, para conceder un gol que les había sido anulado a los venezolanos por fuera de juego. El videoarbitraje demostró que la pelota provenía de un defensor y que por lo tanto no había infracción. Dos minutos se tardó en corregir la acción. En el Corea-Guinea, por su parte, se le anuló un gol al jugador del Barcelona Lee: “Me enfadé cuando lo anularon, pero desde que hay videoarbitraje a uno no lo queda otra que asumir que los árbitros están en lo cierto”, dijo luego.
Era roja. El VAR, por último, sirvió para expulsar al argentino Lautaro Martínez por propinar un codazo a un rival. El colegiado no lo vio, pero en poco más de un minuto los árbitros que visionan la jugada por televisión le comunicaron la agresión al juez principal y este expulsó a Lautaro. El VAR, aunque sea como medida disuasoria contra los que cometen infracciones, ya funciona. También desaparecen los errores definitivos. Hay avances y los nota el aficionado.
Menos agresiones El argentino Lautaro Martínez propinó un codazo que no vio el árbitro, pero sí el VAR
La estrella Lee “Me enfadé cuando me anularon el gol, pero con el vídeo se asume la evidencia”