La planificación se aclara con el ascenso del Fabril
Más protagonismo de la cantera
■ Después de cerrar la permanencia del primer equipo, el Deportivo logró ayer el segundo máximo objetivo de la temporada con el ascenso del Fabril a Segunda B. El filial blanquiazul se impuso al Cacereño en Riazor (2-0) y regresa a la categoría de bronce seis años después.
La gran apuesta que el club hizo esta temporada ha dado sus frutos y el segundo equipo ha logrado subir, además, en la primera eliminatoria, lo que supone un gran avance para la dirección deportiva en la planificación de ambas plantillas. La situación deportiva de la temporada 2017-18 queda aclarada, por lo que Richard Barral y su equipo trabajarán desde ya con escenarios fijos, acortando los plazos que se hubiesen dado en caso de tener que seguir en el playoff.
Una de las ventajas es poder definir ya la estructura que tendrá la plantilla del primer equipo para el próximo curso, con la idea expresada por Tino Fernández de contar con una nómina corta de jugadores que ronde los 20 de campo más dos porteros. La gran diferencia con las últimas campañas es que el meta del Fabril será el que complete la portería ejerciendo de tercer guardameta.
La intención del club es que haya dos fichas libres para canteranos y que jóvenes como Pinchi o Edu Expósito, pilares del Fabril y que este año ya tuvieron presencia en la élite, se consoliden ahora que el salto entre categorías será menor. Pepe Mel ya ha insistido en que les dejará la puerta abierta.
Este trabajo de planificación también afectará a la propia plantilla del filial, que sufrirá cambios para adaptarse a las exigencias de Segunda B y en la que pueden despedirse varios de los puntales más veteranos.
Triunfo El filial blanquiazul se impuso en Riazor al Cacereño por 2-0