Blanco, reelegido con el mayor número de votos
En su cuarto mandato en el COE: sumó 167 sufragios y 4 en blanco
Alejandro Blanco fue reelegido ayer como presidente del Comité Olímpico Español (COE) por cuarta vez. Será la última, porque ya ha anunciado que no optará a un quinto mandato. Aunque era el único candidato, los Estatutos exigen que se efectúe la votación y los miembros de la Asamblea Extraordinaria le dieron su confianza de forma abrumadora, como se esperaba: 167 votos a favor y sólo cuatro en blanco. Las federaciones olímpicas tienen cuatro votos cada una y las no olímpicas uno. Dominio apabullantemente.
Para Blanco, los grandes objetivos serán “hacer los mejores Juegos Mediterráneos de la historia y no perder el sueño olímpico de Madrid porque es la ciudad mejor preparada del mundo para acogerlos”.
El presupuesto del COE para este año tiene previstos unos ingresos de 6.580.039 euros y unos gastos de 6.209.847, lo que arroja un superávit previsto de 370.195. La Asamblea lo aprobó por unanimidad, lo mismo que las cuentas del ejercicio pasado, aunque aquí se registró un déficit de 439.992 euros, debido, principalmente, a las recompensas destinadas a los atletas que ganaron medallas en Río de Janeiro, en los que España subió 17 veces al podio. Los premios por este concepto ascendieron a 1,8 millones, sufragados a partes iguales por el Comité Olímpico, el Consejo Superior de Deportes y el ADO.
Alejandro Blanco sustituyó a José María Echevarría como máximo dirigente olímpico español el 29 de septiembre de 2005, al vencer a Mercedes Coghen por 101 votos a 84. Cuatro años después fue reelegido como único candidato, con 141 votos a favor, diez en blanco y ninguno en contra y en 2013 recibió 153 votos favorables y 14 en blanco, también sin nadie que le disputase la presidencia.
El final Este será su último mandato, según ha anunciado
Judoca. Anteriormente, Blanco, nacido hace 66 años en Ourense, pero que se considera medio vallisoletano (se licenció en Ciencias Físicas), fue judoca, árbitro y entrenador. Ocupó la presidencia de la Federación de Castilla y León entre 1985 y 1993, y posteriormente fue elegido como máximo mandatario de la Española, en sustitución de Luis Báguena. Y desde aquí dio el salto a la presidencia del Comité Olímpico Español. Ayer venció con la máxima suma de votos favorables. Sin desgaste.