Carreño se retira y París verá un nuevo Nadal-Thiem
El austriaco de 23 años liquidó a Djokovic en tres sets
Marcas Nadal suma 10 ‘semis’ en Roland Garros y 100 victorias a 5 sets en tierra
Rafa Nadal vuelve a las semifinales en París. Ayer, Pablo Carreño, su rival en cuartos, tuvo que retirarse por lesión cuando ganaba 6-2 y 2-0 el balear, que se enfrentará a Thiem. El austriaco barrió a Djokovic. Murray y Wawrinka repetirán su duelo de 2016.
ARafa Nadal se le abren hasta los cielos en Roland Garros. En un día desapacible, incómodo por el viento y por la amenaza de lluvia, al nueve veces campeón del torneo no le hizo falta jugar todo el partido contra su compatriota y amigo
Pablo Carreño para avanzar por décima vez a semifinales, donde se las verá por cuarta vez en
2017 con Dominic Thiem, que barrió a Novak Djokovic (7-6 (5), 6-3 y 6-0). Con un sabor agridulce, Nadal sumó su victoria número 100 en partidos jugados en tierra al mejor de cinco sets.
Desgraciadamente, Carreño tuvo que retirarse 51 minutos después del comienzo del duelo por una lesión abdominal. Nadal mandaba por 6-2 y 2-0. Un tirón al ejecutar un saque en el octavo juego del encuentro dejó al gijonés sin opciones de pelear por lo imposible, ganar al balear en París. Ningún español lo ha logrado en 14 enfrentamientos.
Carreño pidió la asistencia del fisio y salió para ser tratado. En unos diez minutos, mientras Nadal trataba de no enfriarse, Carreño volvió con un vendaje en el músculo abdominal izquierdo. Trató de competir, pero en el segundo juego de la segunda manga se resintió al hacer un remate que se le escapó. Después de soltar un grito desgarrador, mezcla de dolor y de rabia, claudicó y firmó el armisticio.
El asturiano, que tuvo el mérito de llevar la iniciativa a ratos y de hacerle a la bestia dos breaks, llevaba 11 horas y 43 minutos en pista; su rival, 7:53. Casi cuatro de diferencia. El último partido de Pablo había sido una batalla a muerte contra Milos Raonic, resuelta en cinco sets; y el del manacorí, un paseo en tres mangas ante Bautista. Es la ventaja de ser casi invencible sobre la arcilla parisina.
Nadal revienta rivales, lo hizo en Roma con Almagro, y ahora le espera Thiem, al que desfondó en la final del Mutua Madrid Open una semana antes de que le derrotara precisamente en cuartos del Masters 1.000 italiano. El joven austriaco dio una exhibición ante Djokovic con 38 golpes ganadores y le rompió seis veces el saque. Mañana será el penúltimo obstáculo hacia la Décima en Roland Garros para el cuarto del mundo (segundo o tercero el próximo lunes pase lo que pase).
Consuelo. Nadal consoló a Carreño: “Lo siento Pablo, tío”, le dijo en pista. Luego explicó que su colega había hecho lo mejor: parar. “Yo no lo hice en 2009, jugué con una rotura de 7 milímetros en el US Open y acabé con 27”. El afectado dio la clave de su retirada: “Ante Rafa no hay nada que hacer si no puedes sacar bien y estar concentrado al cien por cien en el partido. Me voy sabiendo que en un futuro tendré oportunidades en este Grand Slam”.