El Cholo y el Atleti, por el cambio

El primer equipo del Atlético ha arrancado una temporada marcada por la prohibición de fichar hasta enero. Esta sanción de la FIFA, muy negativa para los intereses del Atlético, ofrece una segunda derivada positiva porque va a provocar que Simeone aumente su contrato, que terminaba a final de este curso, hasta 2019 o 2020 (efecto acordeón: del 2020 redujo al 2018 y ahora vuelve a ampliarse). Una decisión lógica y excelente la continuidad del líder colchonero. ¡No va a venir Costa en enero e irse el Cholo en junio!

Una temporada en la que los dirigentes del Atlético arriesgan un montón al realizar muchos cambios. A la mudanza del Calderón al Wanda Metropolitano, traumática de por sí como todas las mudanzas aunque te vayas a una casa más grande y lujosa, se suma el cambio del escudo, que no queda mal la verdad, más el cambio de look de la mascota, un Indi más estilizado y moderno, pero no exento de chanzas en redes sociales por sus enormes pupilas. A todo eso se viene ahora la polémica por el diseño de la nueva camiseta. Quizás luego se venda mucho y tal, pero parece que en vez de rayas tiene rombos. Es rara, vamos. La segunda amarilla es sobria, parece la de los porteros. Y la tercera equipación, de camuflaje con el escudo, marca y publicidad en rosa, es rompedora y cool y seguro que triunfa entre las féminas y el colectivo LGTB colchonero. ¡Mola!

Los tiempos están cambiando, pero en el Atleti todos los cambios han llegado de golpe. Los dirigentes y ejecutivos del Atleti lo hacen con la mejor voluntad. Pero tanto cambio es complicado de digerir de golpe en una afición que quiere ser más partícipe de las decisiones y no se la consulta nada de nada. A lo mejor para el nuevo himno tienen más suerte. De momento, Gabi va a por Luis (en la lista de partidos jugados) y Torres,a por Peiró (en goles). Los dos se merecen un contrato vitalicio. Seguro que Miguel Ángel Gil se lo hace. Con el OK del Cholo, por supuesto.