Las coletas de Fabio y la espontánea María del Mar
■ Hasta hoy, Antequera sólo había acogido una salida de la Vuelta en 2013, camino de Valdepeñas de Jaén; mientras que Motril está inédita, aunque sí ha sido punto de paso. Por ejemplo, en la sexta etapa de 1996. Un día de coletas. Aquel 12 de septiembre, Fabio Baldato (13-06-1968, Lonigo) salió con el objetivo de enfundarse el maillot amarillo de líder con las bonificaciones. Atrapó tres segundos en la meta volante de El Ejido, otro en la de Torrox, que también se cubre hoy. Y finalmente remató con la victoria al sprint en
Málaga, con la que desbancó a Laurent Jalabert en el primer puesto de la general. El italiano, que volvió a vencer al día siguiente en Marbella, retuvo la prenda durante cuatro jornadas. En los perfiles que se escribieron aquellos días sobre Baldato se destacaba que tenía triunfos en las tres grandes y que exhibía una moderna coleta.
No fue la única coleta que lució aquel día en la carrera. En el primer tramo de la etapa, todavía a ritmo tranquilo, se coló una espontánea en el pelotón con la complicidad de los corredores: una cicloturista llamada María
del Mar que rodó una decena de kilómetros en el seno de la Vuelta, sin que los jueces detectaran su presencia. Una foto de
Efe, en la que pedalea sonriente junto a Jalabert, es la prueba que reveló un día después la travesura en los diarios.