Ana Carrasco: 1ª mujer en ganar en un Mundial
La murciana de 20 años, que ya disputó 46 carreras en Moto3 e incluso consiguió puntuar, hizo historia al imponerse en el trazado luso del Algarve en la categoría SSP300 de la FIM
Los adjetivos rimbombantes siempre acompañan las grandes gestas deportivas, pero pocas de ellas son realmente históricas. Y, sin duda, el hito alcanzado por una joven y valiente murciana de 20 años en Portugal lo ha sido. Ana Carrasco se ha convertido en la primera mujer al manillar de una moto que gana una carrera de un Mundial FIM de velocidad. Gesta sin paliativos de la piloto nacida en Cehegín que acumula proezas en un deporte casi vetado en éxitos hasta ahora para su género.
Hija de un mecánico de David de Gea, se subió a la moto de su hermana con tres años y pronto vio que su futuro tena que estar vinculado a las dos ruedas. Debutó y puntuó en el Nacional con 14 años, con 16 años se convirtió en la primera española, y quinta en la historia, en puntuar en el Mundial (fue 15ª en Moto3 en Malasia 2013), corrió 46 GGPP en la cilindrada pequeña y ayer en el Algarve puso su nombre con letras de oro en los libros de historia de las dos ruedas al ganar en la categoría SSP300 del Campeonato del Mundo de Superbike.
Pese a su talento, sus resultados, su constancia, trabajo y tenacidad... el factor económico la fue bajando de las motos, incluyendo tener que regresar al FIM CEV Repsol, y la ha llevado esta temporada a participar esta temporada en la mencionada categoría, que ha tomado el relevo de la European Talent Cup, con el ETG Racing de la Escola Técnica de Girona. Carrasco ya había apuntado muy buenas maneras en las seis carreras precedentes del calendario 2017, de hecho llegaba undécima a Portimao, y allí todo salió bien.
Tercera en la parrilla tras una brillante clasificatoria, Ana realizó una sensacional carrera que la llevó a liderar la prueba al comienzo de la última vuelta. A pocas curvas de la bandera ajedrezada fue adelantada por Marc García y el italiano Alfonso Coppola, nuevo líder tras ser segundo en la meta lusa, pero la murciana no se pudo nerviosa y sabiendo que estaba ante una oportunidad única pegó mucho su Kawasaki a las Yamaha que le predecían y utilizó el rebufo en la recta para ganar con 53 milésimas de ventaja.
Carrasco, que ahora es séptima en la general, estaba eufórica: “Estoy muy feliz. Esto es algo increíble, hemos trabajado muy duro para conseguirlo y quiero dar las gracias a todo el equipo Esta victoria es un sueño hecho realidad para mí y creo que también es fantástico para el campeonato”.