Mestalla: el Valencia tiene otro diseño, no financiación
■ El Valencia anunció el martes que iba a volver a tramitar con el Ayuntamiento las licencias para reanudar las obras del Nuevo Mestalla. No fijaba fecha de inicio. Solo hacía mención a iniciar contactos con la administración para resolver asuntos burocráticos y a lo único que se comprometía era a tratar de “respetar” los plazos del plan urbanístico, el cual sí recalca que el actual Mestalla debe estar derruido en 2023. Pese a la ambigüedad del mensaje del club, el hecho de emitir un comunicado sobre pasos a dar en el Nuevo Estadio generó expectación entre sus aficionados, inclusive entre el alcalde Joan Ribó, que dijo ayer: “Que el campo vuelva a funcionar es una buena noticia”.
Son muchas las promesas incumplidas desde que se presentara su maqueta en 2006. Todas las gestiones han errado en sus predicciones. Por ello el Valencia va con pies de plomo. Principalmente porque sigue sin tener la financiación necesaria para acabar la obra, que requiere de 18 meses y en torno a 150 millones.
El Valencia trabaja en un plan de negocio con el que solicitar crédito. También en buscar comprador para la parcela del actual Mestalla. Pero lo dicho, a día de hoy no tiene el dinero para meter las máquinas. Lo que sí obra en poder del Valencia es el enésimo rediseño del proyecto. El arquitecto Mark Fenwick ya ha presentado al club los bocetos ajustados a los cambios solicitados.