El City, imparable, deja al Nápoles al borde del KO
El equipo de Guardiola volvió a mostrar su poderío
Un imparable Manchester City conquistó la clasificación a los octavos de Champions logrando su cuarta victoria consecutiva en el San Paolo de Nápoles, donde los ingleses triunfaron 2-4 tras el partidazo agónico y emocionante que todos esperaban.
Guardiola dio la sorpresa dejando fuera a Walker, Silva y Gabriel Jesus, buscando más cobertura para su mediocampo, donde salieron de inicio Gundogan, De Bruyne y Fernandinho. Pep sabía que los napolitanos, en su estadio, habrían intentado imitar el arranque infernal que sufrieron en el Etihad, y así fue: en los primeros 30 minutos hubo una situación opuesta a la de la ida, con los azzurri dominando el partido y encerrando a los Citizens en su área. Un asedio que tuvo su premio en el minuto 21, cuando un genial pase de Mertens completó una pared que puso a Insigne solo delante de Ederson, al que batió con su típica rosca.
Fue una ventaja merecida para los sureños, que sin embargo pagaron su enorme presión con un último cuarto de hora de la primera parte sin oxígeno. Los Citizens olieron sangre y se apoderaron del juego, poniendo las tablas en el 35', con Otamendi.
Nada más comenzar la reanudación, Stones puso por delante a los ingleses, pero los azzurri no se rindieron y empataron 14 minutos después, con Jorginho de penalti. A partir de entonces pudo haber pasado de todo: el partido se transformó en un combate de boxeo, con vaivenes y emociones en ambas áreas.
El momento clave llegó en el 69', cuando Hamsik perdió el balón en el límite del área, desenrollando una alfombra roja para el letal contragolpe del City, finalizado por el Kun. Los de Sarri volvieron a buscar el empate, pero otro balón perdido les costó la sentencia en otro contragolpe, ahora con Sterling, que sentenció.