Celtics-Cavaliers: todo o nada en el Garden
Un LeBron James heroico forzó el partido definitivo
Esta noche (02:30, hora española) se jugará un partido que será histórico pase lo que pase: Celtics y Cavaliers disputan el séptimo y definitivo de la final del Este, en el mítico Garden de Boston. Los locales están a un triunfo de la final de la NBA sin dos súper estrellas como Kyrie Irving y Gordon Hayward, lesionados. El factor cancha, especialmente en el Garden, cuenta mucho (10-0 los Celtics en su pista en estos playoffs, 1-7 a domicilio): “Estamos listos para acabar con la boca y la nariz ensangrentadas... estamos listos para luchar, va a ser una pelea de perros”, dice Marcus Smart. El premio, la primera final de la NBA desde 2010 para la franquicia de los 17 anillos.
Pero es que enfrente estará LeBron James, que ha jugado las siguientes siete finales a aquella y que lleva 23 eliminatorias seguidas ganadas en el Este. En el sexto partido, tal vez el último de su vida en Cleveland con la camiseta de los Cavs (acaba contrato y su futuro está muy en el aire), salvó de la eliminación con una actuación de leyenda a un equipo que se quedó sin Kevin Love (por un golpe en la cabeza que le impide estar en el séptimo) en los primeros minutos: 46 puntos, 11 rebotes y 9 asistencias. Jugó más de 46 minutos, los primeros 35 seguidos, y anotó dos triples seguidos en la recta final y con los Celtics todavía a siete puntos. “Lo que acabamos de ver es, sencillamente, grandeza”, dijo su entrenador Lue después del 109-99 final.
LeBron no ha perdido un séptimo partido (cinco seguidos ganados) desde la segunda ronda de los playoffs 2008, precisamente... en el hirviente Garden de Boston. El viernes acabó con un golpe en una pierna y está promediando en los playoffs 41 minutos por noche. Al límite de las fuerzas, se juega esta noche meterse en su octava final consecutiva de la NBA. Enfrente los Celtics, preparados “para acabar la pelea con la boca ensangrentada”. No va más en el Este.