AS (Galicia)

Bélgica asusta al resto

Está virtualmen­te clasificad­a para los octavos de final

- IGNACIO CAMACHO

Bélgica está harta de ser la eterna aspirante. Su victoria ante Túnez la consolida como una de las grandes candidatas al título y a su delantero centro Romelu Lukaku como uno de los favoritos para ser el máximo goleador del Mundial. Con sus dos goles a Túnez, el nueve belga suma cuatro y se coloca el primero en la tabla de goleadores del torneo, empatado con Cristiano Ronaldo.

El equipo entrenado por el español Roberto Martínez practica un fútbol eléctrico y vibrante. La verticalid­ad y la rapidez son las principale­s bazas de un equipo que tiene auténtica pólvora en su ataque. Cuando los Hazard, De Bruyne, Carrasco y compañía roban el balón en el medio del campo, el césped se inclina repentinam­ente hacia el área rival. En tres toques y unos pocos segundos después la pelota ya está cerca de la portería contraria. Si a esta explosivid­ad se le añade la contundenc­ia en el área de Lukaku y Mertens, son muchas las posibilida­des de que las jugadas acaben en gol. Ante Panamá, Bélgica ya dio una pequeña muestra de su potencial, ayer dio un verdadero recital.

A los cinco minutos, Bélgica ya mandaba en el marcador. Ben Youssef derribó a Hazard sobre la línea del área y el árbitro estadounid­ense Jair Marrufo señaló penalti. Ante las protestas de los tunecinos, el VAR confirmó la decisión del colegiado. El propio extremo del Chelsea, que estuvo en casi todas, fue el encargado de transforma­r la pena máxima. Al cuarto de hora, los ‘diablos rojos’ (ayer amarillos) ya contaban con una ventaja de dos goles gracias a un potente disparo cruzado de Lukaku desde fuera del área. Túnez no se arrugó. Se recuperó pronto del mazazo utilizando su mejor arma, el balón parado. A los tres minutos del segundo gol belga, Bronn recortó distancias de cabeza tras el saque de una falta lateral. Cuando los tunecinos empezaban a asomar la cabeza las lesiones de Bronn y Ben Youssef, que tuvieron que marcharse antes del descanso, supusieron un bajón anímico. Para colmo, las esperanzas del conjunto árabe se desvanecie­ron en el descuento de la primera parte, cuando Lukaku mató el partido con su segundo gol tras un gran pase entre líneas de Meunier.

Nada más reanudarse el partido, continuó el festival belga. Hazard aprovechó un balón en profundida­d de Alderweire­ld para anotar el cuarto de Bélgica y el segundo en su cuenta particular. Después de eso, Martínez sacó a sus dos goleadores para darle descanso antes del partido ante Inglaterra y, de paso, demostrar que tiene relevos de altura. Desde el banquillo salieron Fellaini, Tielemans y Batshuayi. Este último firmó la manita en el descuento y Khazri cerró el marcador.

Bélgica está virtualmen­te en octavos y Túnez necesita un milagro para no estar eliminada. Si Inglaterra puntúa ante Panamá, se acabó el cuento.

Eliminada Si Inglaterra puntúa ante Panamá, Túnez estará fuera del Mundial

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 ??  ?? DIABLOS. Miles de seguidores de Bélgica llenaron las gradas del Otkrytie Arena y festejaron el triunfo de su selección.
DIABLOS. Miles de seguidores de Bélgica llenaron las gradas del Otkrytie Arena y festejaron el triunfo de su selección.
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