Un tormento para Cristiano
Uruguay tumba a Rusia, es líder y se verá con Portugal
España, Portugal e Irán, selecciones que tenían opciones de clasificación hasta el final en el grupo B, no veían claras sus preferencias para octavos. No sabían si era mejor cruzarse con la anfitriona, con el peligro que conlleva, o vérselas con una fiera. Ahora, tras el partido entre ellas que cerró el grupo A, ya no hay debate: Godín y Suárez dan mucho respeto y, para colmo, Uruguay no ha encajado y ha marcado sus cinco tantos tras acciones a balón parado. Un coco que no ha necesitado ni quitar aún el bozal a una bestia llamada Cavani. Portugal, segundo del grupo B, se tira de los pelos cuando pudo sonreír. La beneficiada es España.
Tabárez ya aseguró en la previa que iba a hacer los cambios justos, pese a lo que se decía. Su obsesión era ser primero. Dio descanso a Giménez, Varela y poco más, pero hizo una modificación extraordinaria. Cambió los extremos sin desborde por interiores con toque. Jugó con rombo en medio campo, con Bentancur de enganche. Y con su ocurrencia todo cobró sentido. El mediocentro provocó la falta que Suárez materializó en gol (10’) con maestría. Sólo un rato después, en otro córner, Laxalt esperó la segunda jugada para pegarle con malicia y encontrar, con suerte, una pierna de Cheryshev. El orgullo del Villarreal en este Mundial está en racha: mete las suyas y las de los demás; así que Roig, que aprobó en enero su salida, se frota las manos. En una tiene a Pedraza (vuelve del Alavés) y en la otra, una calculadora.
Rusia no sólo se vio fuera del partido con setenta minutos por delante. Lo demoledor es que no se planteó ni remontar. Su actitud, sobre todo, habla a la perfección del terror que ya transmite Uruguay. Cherchesov quitó a Cheryshev en el 38’ condicionado por la expulsión de Smolnikov. Comenzó a pensar en los octavos, donde ya espera España. La Selección se enfrentará ante el equipo con peor ránking FIFA de la competición, aunque ante una contra mortal y un país entero que contagia esa moral por las nubes. Algo que La Roja ya sufrió en Corea.
Mientras el rival dosificaba, Uruguay comenzó a disfrutar con el balón por primera vez. Y, aun así, no bajó la guardia. Sentenció el liderato en otro saque de esquina rematado por Godín y machacado por Cavani. Portugal está avisada. Deberá correr como si lo fueran a prohibir, está obligada a mandar en las dos áreas y ha de ser capaz de sujetar a Suárez y a Cavani, que viene a ser algo tan incómodo como ir por la mañana al urólogo y por la tarde al dentista.