AS (Galicia)

Dembélé se levanta

Brutal golazo del francés, que fue multado por el club ● Cillessen, enorme ● Los Spurs, a octavos

- SANTI GIMÉNEZ REPORTAJE GRÁFICO FERRAN ZUERAS, RODOLFO MOLINA Y GORKA LEIZA

Dembélé se despertó a lo grande antes de que el Barça se durmiera en los laureles aferrado a una actuación sensaciona­l de Cillessen, que acabó con un empate a uno que no afecta al primer puesto del equipo barcelonis­ta, pero que permite a los ingleses pasar a octavos gracias al fiasco del Inter en su casa ante el PSV.

Siete minutos tardó Dembélé en convertir su pereza matinal en una anécdota de genio, en una nota a pie de página, en despejar el recelo de los socios y cambiarlo por una razón para acudir al campo. Si se le levantara de la cama tan rápido como recorre el campo, nunca llegaría tarde. Por la mañana se supo que el Barça le impondría una multa económica que equivale, como poco, a dos hipotecas de triste mortal y horas después, Valverde, que en la previa reconocía que su caso es un descalzape­rros que tiene a todo el mundo desconcert­ado, optaba por darle una oportunida­d como titular para ver si con la pelota se apañaba más que con el despertado­r. Y el resultado fue descomunal.

Ajeno a todo y con el espíritu de un pura sangre, a la primera ocasión que tuvo, el extremo francés recuperó una pelota atropellan­do a Walker-Peters, que todavía busca de dónde apareció el vendaval que le robó la pelota, le cambió de ritmo en plena carrera y que cuando entró en el área rizó el rizo para recortar a Alderweide­ld, que llegaba a la desesperad­a, sentarlo en un quiebro bárbaro, cambiarse el balón de pierna y batir a Hugo Lloris.

A partir de ahí, y teniendo en cuenta que el Barcelona era primero de grupo pasara lo que pasara, el partido ya había valido la pena. Llegaba el momento de valorar las rotaciones de Valverde, que colocó de titular a Aleñá, fabuloso, y a Miranda, que volvió a poner a Arthur y a Coutinho y que dejó la portería en manos de un Cillessen que frustró los intentos de los Spurs de recuperars­e del mazazo de la jugada del francés.

A medida que el partido se sedimentó, el Tottenham se encomendó al coreano Son para tratar de empatar, pero el Barça resistió y cuando estaba a punto de acabar la primera parte Coutinho disparó al palo en una reivindica­ción ante la impresiona­nte puesta en escena del jugador que le relego al banquillo en el último partido de Liga. Luego, se durmió en los laureles.

En la segunda parte, Valverde retiró a Rakitic para dosificar minutos con Busquets y el Tottenham, que no quería depender del PSV, dio un paso al frente, pero se volvió a topar con Cillessen.

Dos arrancadas de Dembélé, que cedió un gol a Coutinho que dudó en la definición, equilibrar­on las fuerzas antes de que Messi ingresara en el campo para jugar la última media hora al tiempo que en Milán, Icardi marcaba el tanto del empate que echaba a los ingleses de la Champions. A los Spurs les urgía el gol y el partido pasó a ser un toma y daca.

Pochettino se lo jugó el todo por el todo poniendo a Llorente por Winks en el instante que Coutinho volvió a chutar al palo en una definición de lo que es vivir en el alambre y Moura, en una contra mal defendida por el Barça, empató en el 85. Los ingleses estaban en octavos y se pasaron los últimos minutos más pendientes de Milán que de lo que pasaba en el Camp Nou, donde Cillessen dio un recital y Dembélé se levantó a tiempo.

 ??  ??
 ??  ?? CASI MILAGROSO. La actuación de Cillessen fue espectacul­ar, pero no perfecta, Lucas Moura logró batirle a cinco minutos del final.
CASI MILAGROSO. La actuación de Cillessen fue espectacul­ar, pero no perfecta, Lucas Moura logró batirle a cinco minutos del final.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain