Una deuda pendiente

En Orriols acabó una racha culé de 400 días sin perder

Orriols tiró al suelo al Barça de Valverde la temporada pasada. Fue a mediados del pasado mes de mayo, cuando el campeonato ya estaba sentenciado y los azulgrana paladeaban un interesantísimo doblete (Liga y Copa) amargado, eso sí, por la trágica eliminación en Champions League a manos del Roma. La racha se alargó por 400 días y para sumar tantas fechas tuvieron que acumularse a los números de Valverde los conseguidos por Luis Enrique en su última campaña. Total, 43 jornadas sin perder hasta medirse al Levante: 34 victorias y nueve empates.

Valverde es un tipo pragmático, que apenas toca lo que ya funciona y que este curso está gestionando el grupo más que otra cosa. Apoyado incondicionalmente por Lionel Messi, el entrenador pudo dar descanso a la mayoría de sus titulares en el último partido de Champions ante el Tottenham (1-1), pensando en el partido de esta noche. Ter Stegen, Piqué, Alba, Busquets, Vidal, Dembélé, Suárez y el propio Lionel serán titulares con el fin de responder con contundencia al plan orquestado por Paco López, un entrenador que sin hacer ruido está haciendo soñar a la hinchada del Levante, agradecidísima a su entrenador.

El Barcelona ha respondido siempre que el compromiso exigía ir al máximo, ya fuese en LaLiga como en Champions. Se dejó, eso sí, puntos en partidos ante rivales que aparentemente deberían haber sucumbido sin mayor problema. Hoy no será el caso. Los valencianos son un bloque comprometido en la presión, que muerden al rival en el medio, aunque atrás, demasiadas veces, no acaban de solucionar como su técnico querría y esta noche no podrán equivocarse.

A pesar de eso, Valverde considera que su equipo ya arrancó y tiene como objetivo llegar a final de año, como mínimo, tal y como está ahora, jugando bien, solventando con criterio y dejando atrás a rivales como el Levante, con el que tiene una deuda pendiente.

Números Estuvo 43 jornadas invicto: 34 victorias y nueve empates