Este derbi es oxígeno puro
El Depor, que nunca ganó al Lugo, busca despegar Los rojiblancos saldrán del descenso si se imponen en Riazor
Riazor prepara sus mejores galas para recibir el derbi ante el Lugo. Todas las entradas vendidas desde el miércoles, mosaico con 34.000 cartulinas en las gradas y más de mil aficionados albivermellos para darle colorido. Ambientazo para un partido que regala oxígeno para el que logre la victoria. Para los locales será abrir de nuevo brecha con el descenso y situarse en la frontera de la tabla, esa desde la que se ve a igual distancia el infierno y el cielo del playoff. Para los de Curro Torres ganar sería oro. Tercera victoria consecutiva y el equipo fuera del descenso. Todo un impulso para la recta final.
No tan buenos son los últimos resultados del Depor, que después de encadenar siete triunfos seguidos ha sumado un punto de los últimos seis que no le dejan olvidarse del abismo del que venía. Necesidad de volver a ganar que se multiplica por las ganas de terminar con el gafe lucense. Y es que los coruñeses todavía no han sido capaces de ganar al Lugo. Cinco derbis en Segunda con cuatro empates y una derrota. Números que escuecen en Riazor a la vez que motivan a los rojiblancos para intentar asaltar por primera vez en su historia el templo blanquiazul.
Continuidad. Las armas de Curro Torres para intentar la hazaña partirán de la solidez que ha encontrado el Lugo tras tres partidos sin perder, los dos últimos con portería a cero. El técnico lucense mantendrá el esquema y el equipo de las últimas citas, con la entrada de Herrera por Valentín y la duda de ver si Carlos Pita, capitán albivermello de crianza blanquiazul, se cuela en el once. Fernando Vázquez, por su parte, también dará continuidad a su once con la novedad de Vicente por el sancionado Gaku Shibasaki y la pólvora de Beauvue, ya recuperado, en el banquillo por si la cosa se tuerce.
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