La Liga de Japón vuelve a disputarse con sobresalto
Tres jugadores tenían fiebre
En medio de la crisis mundial llegan noticias positivas sobre el control del virus en Asia, donde todo comenzó el pasado diciembre. La Liga china de baloncesto, la primera en parar a finales de enero, prepara ahora su vuelta a la acción para principios de abril, cuando cumplirá casi dos mes y medio de suspensión (inicialmente se habló de uno, como ahora en Europa y en la NBA). Y en Japón han dado un paso más y ya se juega: el balón ha vuelto a botar en partido oficial, aunque sin público. La competición estaba detenida desde el 17 de febrero.
Hasta ocho de los nueve encuentros a puerta cerrada programados para ayer se disputaron con normalidad, pero el noveno se suspendió poco antes del salto inicial porque tres jugadores tenían fiebre. El duelo afectado es el que enfrentaba al Kawasaki Brave
Thunders, que ejercía de local, contra el Levango Hokkaido. Los tres deportistas enfermos eran del equipo visitante: Marc Trasolini, Kennedy Meeks y Sean Ichioka.
El aplazamiento llegó a última hora con dos de los jugadores ya en el Todoroki Arena (Meeks y Ichioka), donde ambas plantillas realizaron el calentamiento previo. El tercero (Trasolini) se quedó en el hotel.
Mientras, en España, los jugadores de la ACB no dejan de hacer llamamientos a los aficionados para que se mantengan en casa y frenen así la expansión del virus. Muchos dan ejemplo en las redes sociales. No hubo entrenamientos y el Joventut anunció que ha suspendido “toda actividad deportiva” durante 15 días.
Alfonso Reyes, presidente del sindicato de jugadores, ha caído enfermo, pero evoluciona bien y su hermano Felipe, capitán de un Madrid en cuarentena, no tiene síntomas.
Preparados En China hacen planes para regresar en abril