Mitsubishi ASX a seguir en la brecha
La marca japonesa pone al día su exitoso SUV con algunas modificaciones en el diseño de su carrocería compacta y mejoras en equipamiento de seguridad y conectividad
El ASX se ha convertido en uno de los modelos estrella de la gama de Mitsubishi y la marca japonesa acaba de actualizarlo para seguir disfrutando de la misma aceptación en el mercado. No se trata de una novedad total sino de una puesta al día de este SUV de tamaño compacto, uno de los segmentos protagonistas de las matriculaciones en España.
La longitud de su carrocería es de 4,36 metros y los cambios más apreciables en el diseño se encuentran tanto en el frontal, con un aspecto mucho más poderoso, y en la trasera, aunque en general se mantiene la línea elegante y atractiva de la versión precedente.
El interior muestra una habitabilidad correcta para un coche de su tamaño (aunque le falta algo de anchura en las plazas posteriores), siendo algo menos convincente un maletero con poco más de 400 litros, que quedan por debajo de lo habitual en su segmento. Los acabados se podrían definir de estilo japonés, sin alardes y con algunos plásticos que podrían presentar un mejor aspecto, aunque cumplen como guarnecidos funcionales.
El equipamiento Kaiteki+ es el más completo de la gama ASX y se aprecia en multitud de detalles, destacando los asistentes a la conducción y el nuevo sistema de conectividad. Este último se basa en una pantalla de ocho pulgadas y es compatible con los principales sistemas operativos de teléfonos móviles inteligentes (Android y Apple).
Mitsubishi limita ahora su oferta para este todocamino a un único motor de gasolina y 150 CV, ofreciendo las opciones en la transmisión (delantera o total) y el cambio (manual o automático). Presenta un buen compromiso entre las prestaciones y los consumos, sin ser un coche brillante en ninguno de estos aspectos cumple en ambos. Lo que no resulta aconsejable en modo alguno es el cambio automático CVT, una suerte de variador continuo que, pese a intentar replicar la disponibilidad de seis relaciones, se queda muy por debajo del nivel general del ASX, con un elevado nivel sonoro y vacíos en la entrega de potencia. Su precio en contrapartida, es muy interesante.