Así llegan los jugadores del Barça a LaLiga: Sergio Busquets El ‘caso Arthur’ está abierto
Pese a que el brasileño ha dicho que se queda, en el Barça insisten a nivel interno: “Nada está descartado”
■ El tiempo está alcanzando a Sergio Busquets quien, sin embargo, se resiste admirablemente y continúa siendo el termómetro del Barça. Si Busquets juega bien, el Barça suele jugar bien aunque, a sus casi 32 años, en ocasiones él ya no puede correr tanto como los partidos. Sorprendentemente, Busquets fue suplente en la primera jornada de Liga en San Mamés. Una decisión técnica que le dolió tanto que, según diversas fuentes, afectó a la relación personal con el entrenador. Busquets se sintió algo apartado del núcleo de confianza de Valverde y perdió fe a un entrenador que estaba empeñado en iniciar el relevo. Busquets y Rakitic, el doble pivote sobre el que sustentó el título en la temporada 2017-18, ya no eran indiscutibles.
Su importancia en el equipo ha vuelto a crecer con Setién. El Barça ha recuperado una presión algo más alta. Eso le obliga a estar más junto y eso beneficia a Busquets. Desde que llegó Setién, lo ha jugado todo en Liga menos media hora contra el Eibar. Además, marcó un gol fundamental en Heliópolis. Se ve a leguas que vuelve a ser indiscutible y eso le ha hecho recuperar confianza y aumentar más si sabe su compromiso.
Diversas fuentes del Fútbol Club Barcelona confirmarón a AS que el ‘caso Arthur’ sigue abierto. No ha sido suficiente el comunicado que el brasileño publicó el 29 de abril a través de su agencia de comunicación y tampoco la ratificación que hizo a principios de semana. En la misma, desvelaba off the record a todos los medios, a través de su entorno, una comunicación con Eric Abidal y Ramon Planes, responsables de la secretaría técnica, para confirmar su negativa a jugar en la Juventus la próxima temporada.
“No descartamos nada. Vamos a ver qué piensa en verano”, resumen desde dentro del Barça, lo que confirma que el pensamiento del club aún es incluirlo en alguna operación de traspaso, sea de intercambio de jugadores como el que pretendía con Pjanic (Juventus), u otra para abaratar el precio de Lautaro Martínez (Inter de Milán). O incluso proponerle un traspaso si llega una oferta jugosa.
Algo no parece cuadrar entre Arthur y el Barça hace un tiempo. Se ha instalado una guerra fría entre las partes, que a día de hoy están lejanísimas. El internacional brasileño es quien a día de hoy tiene la sartén por el mango porque tiene un contrato largo, hasta 2024, y está obsesionado con triunfar en el Barça. Sus asesores insisten en que se ha machacado en el confinamiento para olvidar los problemas físicos que ha tenido durante la temporada y que han ido desde un problema en el tendón de Aquiles a la lesión de tobillo que tuvo en el Clásico, pasando por sus viejos problemas de pubis que también le atacaron esta temporada después del partido en el Wanda Metropolitano.
Obsesionado en contratar a Pjanic para que dé consistencia en el centro del campo, el Barça sabe que Arthur es un jugador con mercado y con una cotización alta. Considera, además, que, pese a que su ficha no es alta, no ha terminado de cuajar en sus dos temporadas en el Barça y que este ya ha dejado de ser un club finalista y los jugadores tienen que rendir desde el principio.
Por eso le han abierto la puerta. Ahora Arthur tiene once partidos y la Champions para cerrarla. De viva voz él ya lo ha hecho, pero su caso está abierto.
Espera
El club mantiene su plan y cree que puede cambiar de idea todavía