Una Alemania reformada
El conjunto de Löw cambió desde la final de Viena de 2008 y contó con cinco caras nuevas en el once tipo
Los cuatro primeros deslumbraron el verano de 2009 en el Europeo Sub-21 de Suecia, cuya final ganaron tras golear a Inglaterra (4-0) y en el que también se midieron a España en la fase de grupos (0-0). Por su parte, Müller explotó poco después, en la pretemporada del Bayern Múnich, con el que había cuajado una campaña magnífica.
También sirvió para la mutación alemana el adiós de varios buques insignia, casi todos ellos intocables hasta hace bien poco. Lehmann, Metzelder, Frings, Hitzlsperger y, sobre todo, Ballack dejaron un hueco por decisión técnica o lesión que supieron aprovechar muy bien todos esos jóvenes que venían por detrás.
Fue mucho más distinto en el caso español, comparando los conjuntos de 2008 y 2010. Y es que Vicente del Bosque mantuvo el bloque campeón, aunque con su legado en el once inicial de Piqué, Busquets y Xabi Alonso.
La principal preocupación de Joachin Löw para las semifinales contra España estaba en encontrarle un recambio de garantías a Müller, sancionado. El técnico alemán barajaba dos opciones, con un veinteañero Toni Kroos o Trochowski, quien más tarde acabaría fichando por el Sevilla.
El sistema 4-23-1 parecía intocable y así terminó siendo. El elegido finalmente sería Trochowski, más habituado a actuar pegado a la banda que el ahora jugador del Real Madrid.
Revolución Sólo nueve alemanes estuvieron convocados en la Eurocopa