José Castro, el presidente del talante conciliador
Busca su cuarta Europa League
Otra vez? Sí, otra vez?”. Suena desde Alemania el mantra europeo de José Castro, que sonríe de nuevo en busca de la que sería su cuarta Europa League como presidente del Sevilla, sexta en 14 años para el club. Ante el Wolverhampton, el equipo de la casta y el coraje sumó la victoria número 200 desde que el utrerano cogió las riendas del club a finales de 2013, en la temporada que inauguraba la Dinastía continental de Nervión: Europa Leagues de 2014, 2015 y 2016. Los problemas con la justicia de José María del Nido, resueltos finalmente con varios años de cárcel, precipitaron el ascenso de un hombre que había estado más de un década de escolta, en la vicepresidencia, primero con Roberto Alés y luego con el propio Del Nido.
La caída a los abismos en la noche europea de Praga precipitó dos campañas después el regreso al club de Monchi, del que algunas voces aseguraban que nunca “volvería al Sevilla” mientras Castro fuera presidente. Un año y pico después de aquello y a pesar de haber remontado el vuelo con otro cuarto puesto y un nuevo éxito en competición continental, pase lo que pase esta noche, la sombra de Del Nido vuelve a cernirse sobre la cabeza del presidente utrerano y las de la mayoría del grupo del accionistas que comparten Consejo con él, incluido el hijo de abogado, José María del Nido Carrasco. La buena relación actual entre vicepresidente y presidente es el vivo ejemplo de la unión actual que se vive dentro del Nervión, clave en el devenir de una gran temporada.
Monchi Dos años después, el éxito llegó con el director deportivo