Alemania da la puntilla al turismo P
ese a que el Instituto Robert Koch (RKI) reveló hace unos días que España no era la principal responsable del repunte de coronavirus sufrido en Alemania, Berlín decidió declarar el viernes a todo el territorio español, salvo Canarias, como zona de riesgo. Hasta el momento, solo figuraban en la lista negra Madrid, País Vasco, Aragón, Cataluña y Navarra. Pero el repunte de contagios y rebrotes, que se ha acentuado especialmente en las dos últimas semanas, ha hecho que se amplíe a prácticamente todo el territorio nacional, incluidas las Islas Baleares, zona frecuente de turistas alemanes.
También influye en esta decisión la tasa de contagios diarios por encima del valor 1, que
Alemania considera la línea roja si se repite durante siete días consecutivos. Así, el Ministerio de Exteriores alemán publicó una actualización en su página web desaconsejando "los viajes turísticos innecesarios a España, con la excepción de las islas Canarias, debido a las altas tasas de infección".
La primera consecuencia fue que el turoperador TUI canceló desde ayer todos sus paquetes de viaje a la Península y Baleares y sólo mantuvo en oferta los que tienen como destino las Islas Canarias. "Los paquetes de tours de TUI a España se cancelarán hasta el 24 de agosto", señaló el viernes el portavoz de la compañía, Aage Dunhaupt, al diario alemán Bild. De esta forma, los clientes podrán "optar por elegir un nuevo destino, sin coste", según indicó. Por último, Dunhaupt también resaltó que se organizarán viajes de vuelta por adelantado para repatriar a los turistas "que ya están de vacaciones" en aquellas regiones de España consideradas peligrosas por el Gobierno alemán.
Berlín ya anunció hace días la imposición de pruebas PCR y cuarentenas domiciliarias a los viajeros procedentes de países como España. Estos tienen que someterse al test máximo 48 horas antes de llegar o bien en las 72 horas siguientes a aterrizar, ya sea en centros establecidos en aeropuertos, estaciones de tren y terminales de autobús, o en consultorios médicos. Hasta tener los resultados, deben estar en aislamiento domiciliario. Negarse a seguir el protocolo puede conllevar una multa de hasta 25.000 euros.
Esta medida supone el último golpe al sector turístico español, que se queda sin otra gran fuente de clientes tras perder el mercado británico hace semanas. En 2019 visitaron España más de 11 millones de alemanes.