“Soy el entrenador, la responsabilidad es mía y lo asumo” Zidane
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¿Es un fracaso caer ante un Segunda B y contra diez? —Tuvimos ocasiones para meter el segundo y, cuando no lo metes, en una falta puede pasar. Con 1-1 es un partido diferente. Es un momento difícil. Los jugadores lo han dado todo en el campo. Lo intentamos, pero estamos fuera de la Copa. —¿Qué parte de la culpa es suya y qué parte de los jugadores? —Soy yo el entrenador, la responsabilidad es mía. Lo voy a asumir. En el fútbol hay que meter las ocasiones. —Se habla de vergüenza y de ridículo. ¿Es para tanto? —Esto es el fútbol. Son cosas muy difíciles. Es verdad que jugamos contra un Segunda B y normalmente tenemos que ganar el partido, pero no es una vergüenza. Son cosas que pueden pasar. No vamos a volvernos locos y vamos a pensar, seguir trabajando y sacar esto. —¿Cree que su mensaje no les llega bien a los jugadores? ¿Los jugadores siguen creyendo en usted? —Hay que preguntarles a ellos, pero yo creo que sí. Yo creo que hicimos cosas buenas en la temporada. Ahora tenemos que centrarnos en la Liga y en la Champions. Estamos en el mismo barco aquí. —¿Teme un poco más por su puesto que antes?
—Yo estoy tranquilo. A veces pasan cosas diferentes. Hay que asumirlo.
—¿Es su derrota más dolorosa como entrenador?
—Todas las derrotas son dolorosas. No sólo esta en particular. A mí no me gusta perder y a los jugadores tampoco.
Este año, Zinedine Zidane está rotando muy poco, apenas nada, únicamente cuando la necesidad impera. El técnico francés, a lo largo de su recorrido como entrenador del Real Madrid, se había caracterizado precisamente por todo lo contrario. Le gustaba utilizar todas las piezas y hacer que estas mismas se sientan útiles e importantes. Algo se ha perdido por el camino. Futbolistas como Isco, Marcelo, Mariano, Militao, Odriozola, Vinicius, Valverde y Odegaard han desaparecido casi completamente de las alineaciones. Si el entrenador no está contando con jugadores de tanto valor y tanta calidad en sus botas, será porque espera mucho más de todos ellos.
Es evidente que se trata de un círculo vicioso; si no juegas no puedes demostrar y vas perdiendo ritmo de competición, y cada vez se hace más complicado demostrar cuando te toca jugar. Aun así, el camino es agarrarse a los minutos que te dan como si te fuera la vida en ello, sean los que sean y sean donde sean. Yo, siempre que hay talento, soy optimista en cuanto al hecho de recuperar futbolistas para la causa. Sólo queda remar al máximo en la adversidad y esperar a que el viento vuelva a soplar a tu favor en el futuro próximo.
Reacción “Ahora tenemos que centrarnos en la Liga y la Champions”