Pablo Moreno aniquila a un Espanyol impotente
Los pericos se topan con un Juan Carlos increíble
El Girona es el protagonista de las pesadillas del Espanyol esta temporada. Si el conjunto rojiblanco fue el primero en ganar al Espanyol en su estadio, ahora le hace estrenar la segunda vuelta con una derrota. Los gerundenses fueron un muro, con muchísima culpa de Juan Carlos, y, gracias al gol de Pablo Moreno, suman tres puntos de oro. Los pericos mostraron intensidad, intención, calidad y fútbol, pero no gol. Justo lo que sí tuvo un Girona combativo que sale reforzado del derbi y catapultado hacia la lucha por el playoff.
El Espanyol empezó acosando y sometiendo al Girona y, si en el 20’, el conjunto perico se hubiera colocado 0-2 a muy pocos le hubiera sorprendido. Tras un aviso de Puado, Melamed y David López hicieron que Juan Carlos se colocara bajo el foco y se luciera. Sus intervenciones fueron tan fantásticas como alentadoras para un bloque rojiblanco que al verse intacto dio un paso adelante. Samu Saiz, repleto de calidad, dio vértigo a las acciones de ataque. Pero si de calidad se trata, Embarba, que además cumplía un año de su fichaje por el Espanyol, la demostró con una acción, en el 29’, que acabó con el balón estrellándose en el palo.
Castigo. Los gerundenses llegaron a colgarse del palo, pero la falta de pegada perica fue alarmante. Ocasiones, entre Keidi Bare, RdT y Cabrera, tuvieron para aburrir. ¿Pero saben qué sucede cuando se perdona? Efectivamente, 1-0. En el 41’, Pablo Moreno, habilitado por Miguelón, aprovechó un balón que fue al espacio tras un rebote para retar a Diego López y marcó.
Tras el descanso, el Espanyol apareció impetuoso, aunque siguió negado de cara a gol. RdT no acertó a marcar sin portero, Calavera sacó el balón sobre la línea de gol, y Puado se topó con el palo en el 54’. Después, todo el mérito fue para un imperial Juan Carlos. Amargó a Keidi Bare y construyó un muro imposible de derribar. Los de Vicente Moreno siguen líderes, pero están a merced del Almería.