Camavinga espera al Madrid
El jugador ve con buenos ojos la idea de refugiarse en el Rennes con la renovación y dar tiempo a que pase la crisis por la pandemia
Apesar de la crisis económica que reina en el fútbol europeo, Camavinga aún aspira a jugar en el Madrid. Según ha podido saber AS, el centrocampista francés de 18 años, la gran irrupción del fútbol de los últimos tiempos, está considerando la posibilidad de retrasar su salida del Rennes, que estaba prevista para este verano, para dar tiempo así al club blanco a que sus ingresos se vean reestablecidos tras la pandemia.
Los acontecimientos llevan al jugador en esa dirección. De un lado, reconocen desde su entorno a este periódico, no llegan ofertas contundentes ahora que es el momento de la verdad, porque la crisis aprieta a los clubes de toda
Europa. Por otro lado, todo ha sucedido muy rápido en los últimos meses para el futbolista, que ha batido todos los récords de precocidad en su país y parece haberse estancado por la presión. El joven ve ahora casi como una necesidad seguir resguardado en el Rennes una temporada o dos más, el equipo en el que creció y en el que conoce a cada uno de los trabajadores desde que era un infantil.
Es un cambio radical en los planes del jugador. Camavinga cambió hace unos meses de representante con la idea de buscar la mejor salida este mismo verano. Ahora lleva sus asuntos Stellar Group, propiedad de Jonathan Barnett, el agente de Bale. Antes del cambio, ya hubo un acercamiento importante del Madrid con su anterior agente, Moussa Sissokó. Fue Juni Calafat el encargado de realizarlo. Eso fue antes de la crisis por la pandemia. El escenario es bien distinto ahora para el club blanco. Camavinga tiene contrato con el Rennes hasta 2022 y este verano era el momento ideal para salir. Ahora, aconsejado por Stellar, no se descarta la posibilidad de que renueve. Es joven y la posibilidad de ir al Madrid será mayor a medio plazo que a corto, en el que la entidad blanca tiene sus esperanzas puestas en un jugador franquicia: Mbappé y, si no es posible, Haaland.
Mayoral (Roma). Discreta actuación del delantero en los 67 minutos que jugó en la victoria (3-0) de los giallorossi contra el Udinese.
Brahim (Milan). Los rossoneri cayeron 2-0 ante el Spezia sin el malagueño, con molestias en el muslo.
Reinier (Dortmund). Terzic dejó de nuevo en el banquillo al brasileño en el empate (2-2) con el Hoffenheim.
Vallejo (Granada). Desafortunado en los dos goles del Atlético. El gol decisivo llegó tras rebotarle en el pie derecho un chut de Correa.
Kubo (Getafe). Intervino poco en los 33 minutos que jugó en la derrota (0-1) contra la Real Sociedad.
Contexto La crisis se hace notar y el futbolista ha dejado de recibir ofertas contundentes
Su club El joven ve ahora casi como una necesidad quedarse un año más