Un Peugeot 3008 para muy exigentes
La mecánica híbrida enchufable es el complemento perfecto para un SUV convincente en la mayoría de los aspectos, desde las prestaciones hasta la eficiencia o el dinamismo
Con un estilo muy personal tanto en su diseño exterior como interior, el Peugeot 3008 se ha convertido en uno de las propuestas más atrevidas y convincentes en el segmento de los SUV de tamaño compacto. Recientemente ha recibido una actualización muy interesante, que incluye las ya inevitables motorizaciones híbridas, con el tope de gama en la versión enchufable Hybrid 300.
Su mecánica se basa en la combinación de un propulsor de gasolina de 1,6 litros y 200 CV con otros dos eléctricos: el delantero de 110 CV y el trasero de 112. La potencia conjunta son unos excelentes 300 CV, con las ventajas de la tracción total y una caja de cambios automática de ocho relaciones. Los motores eléctricos se alimentan con una batería de 13,2 kWh, recargable en cuatro horas y que ofrece una autonomía homologada de 59 kilómetros (unos 40 en la práctica).
Se trata, en consecuencia, de un automóvil que se beneficia de las ventajas del etiquetado 0 de la DGT y de unas prestaciones más que satisfactorias. El rendimiento total es sobrado para un coche de su estilo, que ofrece un comportamiento dinámico similar al de un turismo y un agrado de conducción más que reseñable. Por si esto fuera poco, su eficiencia no admite discusión, obteniéndose los beneficios más evidentes cuando la utilización se centraliza en el entorno urbano.
El conductor puede elegir entre diferentes modos para gestionar el flujo de energía, siendo lo más sencillo recurrir al Hybrid que realiza de forma automática esta tarea con la mayor efectividad posible en cada momento. También se puede seleccionar el sistema de tracción total si se circula por firmes de baja adherencia.
La habitabilidad interior es justa para un uso familiar intensivo, mientras que la calidad general del producto es alta, la habitual desde hace ya tiempo en los productos de la marca del león. El equipamiento se presenta muy completo en la versión GT Pack posicionada en lo más alto de la oferta, una circunstancia que, como no podía ser de otro modo, se refleja en un precio que roza los 50.000 euros.