Koeman, sargento de hierro
El holandés critica el partido de Mingueza, Araújo y Pedri, en su afán por evitar que los jóvenes bajen la guardia
Oscar, jugamos con tres!”. Mingueza sacó de sus casillas a Koeman en una acción del partido contra el Getafe y el holandés, que estaba empezando a ver peligrar el partido, tiró por la calle de en medio y sustituyó al central. Fue el momento de Umtiti, que ayudó a cerrar el partido en un último cuarto de hora en el que el Barça necesitaba orden. Mingueza había roto la disciplina del equipo y Koeman le castigó con el cambio. “Luego hablamos”, pareció decirle a Mingueza cuando el chico de Santa Perpetua de Moguda se le acercó para saludarlo.
El técnico admitió al final del partido que tal vez se había excedido, porque si alguien merece un aplauso esta temporada es Mingueza. Pero el holandés se siente legitimado para tirar de las orejas a los jóvenes. Él les ha dado la oportunidad y quiere que mantengan la tensión. El jueves, Pedri y Araújo también recibieron un toque de atención después del partido ante el Getafe.
Pero Koeman no ha hecho esto sólo con los jóvenes. A principio de temporada, el holandés fue exigente con Griezmann por su falta de puntería un ataque. También con Dembélé, al que pidió que pensase mucho más en el juego. Eso por no hablar de su exigencia con Pjanic, que llegó con el cartel de estrella al Barça y al que no ha dado protagonismo. Para Koeman, los galones hay que ganárselos, y Pedri o el mismo Ilaix han dado mucho más que el bosnio. No se casa con nadie. Fiel a su carácter, Koeman suele expresarse tal y como es ante los medios. Y en el vestuario. No se casa con nadie, y seguramente ese sentido de la justicia le ha dado autoridad en la caseta.
Si no le parece bien el partido de su equipo, lo dice; si cree que el árbitro no ha estado al nivel o no entiende el funcionamiento del VAR, lo denuncia. Tal vez la sinceridad pueda pasarle factura más adelante, pero en este momento está ampliamente respaldado. Primero, por el vestuario, que sabe que le ha conducido hasta aquí y que quiere volver a ganar cosas, como el título de la Copa del Rey que levantó recientemente. Y luego, por la afición, que considera que el holandés ha devuelto la seriedad y la cultura del esfuerzo al vestuario azulgrana.
Reproches Griezmann y Dembélé, dos pesos pesados, también los han recibido
Justicia Tratar a todos igual, sin distinciones, le ha dado credibilidad