Golpe de autoridad de los Hispanos ante Alemania
Notable debut con Víctor Tomás y Rivera de estiletes
Para empezar, golpe de autoridad. No sólo por la victoria ante Alemania, también por la manera de dominar el encuentro a lo largo de los 60 minutos, participando todos los jugadores con más o menos fortuna, y sabiendo controlar, porque España nunca dio la sensación en la pista que pudiese hincar el pie ante los fornidos germanos.
España volvió a apostar en defensa por su 6-0 habitual, con unos minutos de la segunda parte en 5-1, con dos cambios. Alemania, también en 6-0, pero con sólo un cambio. Quizá por eso en el inicio llevó la iniciativa, jugando a mil por hora.
A los 10 minutos ya estaba controlado el encuentro. Los alemanes empezaron a dar muestras de debilidad, a perder balones, a chocar con el muro Guardiola-Morros, con Sterbik sumando esas paradas vitales. Por momentos parecía que el choque se rompería antes del descanso, pero en los últimos minutos España entró en crisis ofensiva, se dejó algún gol, y en el último minuto perdió a Gurbindo (exclusión). Y lo que es peor, con el partido a cero, con golpe franco a favor, dos minutos para Raúl Entrerríos y otros dos para Maqueda por golpear la cara de un alemán en un lanzamiento de golpe franco.
Alarma. España empezaba la segunda parte con una triple inferioridad y encasquillada ofensivamente ante Wolff. Pues, la emergencia se saldó 1-1, un respiro, y la demostración de que el encuentro tendría que caer del lado español, que siempre encontró a los extremos (Víctor Tomás y Valero Rivera) para finalizar las acciones, que disfrutó del debut de Juan del Arco a alto nivel, y que, además, recuperó el liderazgo de Joan Cañellas, que jugó y marcó cuando era necesario.