Chen lleva al Espanyol los principios de Raúl
El nuevo dueño es un admirador del siete blanco
Aunque el Espanyol conforma su primera inversión en el mundo del fútbol — tras aglutinar empresas de juguetes, vídeojuegos en línea y hasta productoras de películas y series chinas—, a Chen Yansheng no le viene de nuevas lo que califica de “pasión”. El domingo, aunque no tiene previsto acudir al palco del Santiago Bernabéu, vivirá su primer gran partido desde que es oficialmente propietario del club perico, con un 54 por ciento del capital social. Ya asistió sin ser aún dueño al Espanyol-Barcelona de Liga, el pasado día 2, y dio suerte a su nueva entidad: acabaron 0-0.
“El Espanyol me ha enamorado”, reconoce Míster Chen —como se le conoce popularmente desde que le llamó así el anterior accionista principal, Dani Sánchez Llibre—, quien explica que hace 20 años que conoce al club perico, ya que la Liga española es popular en China. Cada vez más, gracias a los horarios del mediodía y las 16:00. Pero también conoce, como es natural, al Real Madrid. No en vano, en la visita que AS realizó hace dos meses a la sede central de su compañía, Rastar Group, en Shantou, el magnate asiático mostró con orgullo la camiseta que Raúl González Blanco le regaló con dedicatoria incluida durante la gira que el equipo blanco hizo por China en verano de 2003. La Champions. Chen declaró a este periódico que “Raúl ejemplifica los principios de Rastar y también los que quiero para el Espanyol”. Y los enumeró: “Se trata de actitud, profesionalidad y mucho trabajo”. Incluso reconoció que, si todavía estuviera en activo, le encantaría haberle fi chado para el Espanyol.
Ese tipo de valores son los que pretende implantar en el Espanyol, hasta el punto de que se cumpla el deseo que expresó la pasada semana, en su presentación como propietario y nuevo presidente: “Espero ir a la Champions en tres años o menos”. El primer paso, ahora que están a cuatro puntos del descenso, sería dar la campanada en el Bernabéu.