Chen, la revolución tranquila del Espanyol
Lleva once días de dueño y ha invertido 50 millones
Las frases motivacionales se reproducen en las sedes que su conglomerado, Rastar Group, tiene repartidas por la región china de Cantón, que abarcan la fabricación de juguetes, videojuegos en línea y la producción de series y películas. “La actitud y la aptitud son vitales”, es uno de los lemas de la fábrica de Shantou, de 175.000 metros cuadrados. “Con entusiasmo, nada será un problema”, se lee en Team Top Games, en Guangzhou. Y esa pasión es la que el nuevo propietario del Espanyol, Chen Yansheng (22-12-1969, Guangdong) imprime en la revolución tranquila que ha trasladado al club desde su llegada oficial, el día 20, en que también asumió la presidencia.
Un sosiego que hoy tratará de mantener ante el Real Madrid, si bien podría vivir el partido sin disimular su nervio- sismo, ya que no estará en el palco del Bernabéu. Chen pretende alejarse de la imagen de cierto derroche que han desprendido la mayoría de inversores extranjeros que aterrizaron en la Liga: desde el jeque Al Thani en el Málaga al valencianista Peter Lim, pasando por el catastrófico Ali Syed, el empresario indio que compró el Racing de Santander. “Dentro de diez años aún me veo en el Espanyol. Vamos a experimentar un crecimiento paulatino, hasta internacionalizar al club, que no tiene límites”, explicó a AS. Solo en China, aspiran a tener cinco millones de seguidores.
El saneamiento de la entidad es crucial en su plan de desa-
Expansión Aspiran a los cinco millones de seguidores pericos sólo en China
rrollo. La deuda bruta el pasado 30 de junio ascendía a 185 millones de euros. Pero lo más inquietante es que a un año vista había que devolver 92. Por eso, Chen ya ha invertido 50 millones: cerca de 17 en adquirir el 54 por ciento del capital social y el resto, para cancelar el crédito sindicado que se pidió para construir el estadio de Cornellà y para afrontar pagos urgentes a la Agencia Tributaria. Y también ha abonado 1,15 millones por ahora en este mercado de invierno para comprar a Óscar Duarte, que hoy debutará, y dos para retener a Caicedo. Su objetivo deportivo es ambicioso: “Llegar a la Champions en menos de tres años”.